COMENTARIO TEXTO EXPOSITIVO2 SOLUCI N
TEXTO:
La España visigoda, que tan fácilmente fue conquistada por los musulmanes, adolecía de graves debilidades internas. El examen de la situación de la Península Ibérica al comenzar el siglo VIII resulta necesario no sólo para comprender la conquista, sino también para apreciar debidamente el desarrollo cultural de la España islámica.
Parece que, aprincipios del siglo VIII, la aristocracia visigoda y la nobleza hispanorromana se habían fundido en un solo grupo privilegiado, que incluía a todas las «clases elevadas». En el seno de esta clase superior existían fracciones opuestas, pero no parece que el enfrentamiento respondiera a causas raciales. A las clases elevadas pertenecía también la jerarquía eclesiástica.
Sin embargo, la monarquía mismadistaba de ser fuerte. En principio, el rey era elegido por las clases elevadas de entre sus propios miembros. No existía una regla fija sobre la sucesión. Algunos reyes trataron de asegurar la sucesión de uno de sus hijos asociándole a su poder antes de su muerte, pero los restantes miembros de las clases superiores con frecuencia no estaban de acuerdo con este procedimiento. Las intrigas entorno a la sucesión fueron constantes. La debilidad del rey respondía también a la inadecuada naturaleza de su ejército. En teoría, todos los hombres libres capaces de empuñar las armas estaban obligados a la prestación militar cuando el rey les convocaba a ello; cada hombre mantenía una relación directa con el rey, a quien debía lealtad. Parece ser que, hacia fines del siglo VII, los reyesencontraron grandes dificultades para reclutar un ejército adecuado.
Además de las clases elevadas, la población se componía de hispanorromanos libres, así como de una considerable proporción de campesinos en régimen de servidumbre, sucesores de los «coloni» romanos. Este último grupo social vivía en condiciones muy duras, pero también los hombres libres se encontraban discriminados. Porconsiguiente, el descontento era grande, y amplios sectores populares recibieron a los musulmanes como libertadores y les apoyaron con todas sus fuerzas. Las ciudades, en particular, se encontraban en una situación más desfavorable que bajo la dominación romana, y habían perdido muchos de sus privilegios municipales. Dado el primitivo modo de vida de los visigodos, no es de extrañar que apenasapreciaran los beneficios del comercio y de la vida urbana en general; pero la razón más importante ha de buscarse probablemente en la regresión económica general que siguió a la caída del Imperio Romano.
Esta minusvaloración del papel del comercio tal vez fue una de las causas del severo trato a que fueron sometidos los judíos del reino, puesto que muchos de ellos eran comerciantes. Otro factor fue laíntima asociación entre los obispos y el rey; una gran parte de las tareas de gobernación del reino se discutía en los concilios eclesiásticos, y las jerarquías de la Iglesia, influidas naturalmente por consideraciones teológicas, veían a los judíos como enemigos. Los decretos especialmente rigurosos del Concilio del 693 hicieron prácticamente imposible que los judíos prosiguieran su actividadcomercial, y un nuevo decreto del año 694 condenaba a la esclavitud a los judíos que no aceptaran el bautismo. Incluso aunque posteriormente esta medida se suavizara en la práctica y no se cumpliera estrictamente, el gran descontento existente entre los judíos contribuyó tal vez a estimular los proyectos musulmanes de invasión; en cualquier caso, es seguro que los judíos del norte de Áfricaestaban dispuestos a proporcionar toda la información que poseían. Una vez derrotado el ejército visigodo por los musulmanes, los judíos les apoyaron con todas sus fuerzas.
La debilidad del reino visigodo puede atribuirse, así pues, a tres factores principales: las divisiones entre las clases elevadas acerca de la sucesión del reino; el descontento de los demás sectores sociales ante los...
Regístrate para leer el documento completo.