imprenta
ÍNDICE
CAPÍTULO IV
LA REGULACIÓN DE LA EMPRESA PERIODÍSTICA
I. El marco jurídico de la prensa . . . . . . . .
Elementos de legislación extranjera . . . . .
II. La normatividad de la dirección periodística
Elementos de legislación extranjera . . . . .
III.
IV.
V.
VI.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
..
.
.
.
113
116
117
118
Deberes administrativos de la empresa periodística . . . . . .
Las ayudas del Estado a la prensa . . . . . . . . . . . . . . .
El papel periódico y PIPSA . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Las restricciones a la libertad de información conforme a la
Ley de Imprenta . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
119
122
125
131
CAPÍTULO IV
LAREGULACIÓN DE LA EMPRESA PERIODÍSTICA
I. EL MARCO JURÍDICO DE LA PRENSA
La prensa escrita en México tiene una regulación jurídica positiva con
grandes dosis de polémica y de ineficacia, que afectan por ende el principio de seguridad jurídica que hubiese sido deseable en la legislación de la
materia. Lo anterior se desprende de tres razones principales, a saber:
En primer término, porque setrata de una legislación previa a la Constitución Política de 1917, circunstancia que en principio implicaría la
abrogación de dicho cuerpo normativo, en virtud de haber sido abrogada
también su norma fundante básica; es decir, la Constitución Política de
1857, conforme a la cual pudo expedirse la Ley de Imprenta que, pese a
todo, es la única referencia jurídica que existe a la fecha sobre lamateria.
En segundo término, porque la Ley de Imprenta no fue expedida conforme al procedimiento previsto por el ordenamiento jurídico (trátese
conforme a la Constitución de 1857 o a la vigente de 1917), sino por una
cuestionable competencia autootorgada por el jefe del Ejército Constitucionalista, Venustiano Carranza, razón por la cual en el mejor de los casos
equipara dicha ley a la figura dedecreto del Ejecutivo con las limitaciones
normativas que ello implica por lo que hace a su fuerza legal como norma
reglamentaria de un artículo constitucional, aunque sólo sea en forma
provisional, según reza en los considerandos de dicha ley.
En tercer término, porque la conducta contraria a la prevista como
debida por la norma no ha sido sancionada con las penas establecidas por
lapropia legislación, toda vez que la evolución de la sociedad civil ha
supuesto una reforma de actitud y comportamiento que no se ha visto
reflejada en las hipótesis normativas que integran el articulado de la Ley
de Imprenta, pero sí en los órganos jurisdiccionales que se han negado, en
113
114
RÉGIMEN JURÍDICO DE LAS LIBERTADES DE EXPRESIÓN
la mayoría absoluta de las veces, a impartirjusticia teniendo como fundamento legal a la referida Ley de Imprenta.
Esta discusión se comprenderá bien a bien si se analiza el contexto en
el que fue creada nuestra legislación de imprenta. Una vez concluidos los
trabajos del Congreso Constituyente de 1917, pero anterior a la entrada en
vigor de la nueva carta magna (el primero de mayo de 1917) fue expedida
la conspicua Ley de Imprenta pordon Venustiano Carranza “ entre tanto el
Congreso de la Unión reglamenta los artículos 6o. y 7o. de la Constitución
General de la República” .161
Al respecto ha habido una larga discusión en torno a la validez de la ley
en cuestión.162 Y es que en estricto sentido formal, como ya se dijo, la Ley
de Imprenta fue abrogada por la propia Constitución de 1917 al desaparecer la norma fundanteconforme a la cual fue expedida. Desde el punto de
vista del derecho positivo una norma requiere satisfacer dos condiciones
para ser considerada válida; es decir, existente. Primero, que en su proceso de producción se hayan cumplido con todas las formas legales previstas
por el ordenamiento normativo como debidas para producir normas jurídicas. Y, segundo, que tenga un mínimo de eficacia; es decir,...
Regístrate para leer el documento completo.