Relatividad
INTRODUCCIÓN
En
el
mundo
macroscópico
de
las
experiencias
cotidianas,
la
velocidad
de
la
luz
(c),
es
siempre
mayor
que
la
velocidad
de
los
objetos
en
movimiento
(u)
o
de
las
ondas
mecánicas,
con
respecto
a
cualquier observador.
En
este
medio
macroscópico
fue
donde
se
formularon
por
primera
vez
las
ideas
sobre
el
espacio
y
el
tiempo
y,
también,
donde
Newton
desarrolló
el
sistema
de
la
mecánica.
En
el
mundo
microscópico
es
muy
fácil
encontrar
partículas cuyas
velocidades
se
aproximen
a
la
de
la
luz.
De
hecho,
los
experimentos
demuestran
que
la
mecánica
newtoniana
no
predice
las
respuestas
correctas
cuando
se
aplica
a
tales
partículas
rápidas.
En
1905
Einstein
dio
a
conocer
su
teoría
especial
de
la
relatividad.
Lo
que
le
motivaba
era
el
deseo
de
comprender
mejor
la
naturaleza
del
electromagnetismo;
sin
embargo,
con
su
teoría,
Einstein
también
extendió
y
generalizó
la
mecánica
newtoniana,
prediciendo correctamente
los
resultados
que
se
obtendrían
en
los
experimentos
que
se
realizaran
a
cualquier
velocidad,
desde
u/c
–>
0,
hasta
u/c
–>
1.
Con
las
teorías
de
Einstein
se
obtuvo
una
imagen
completamente
nueva
de
la
naturaleza del
espacio
y
del
tiempo,
y
además
se
puso
de
manifiesto
la
estrecha
relación
que
existe
entre
la
mecánica
y
el
electromagnetismo
,
ya
que
la
luz
es
un
fenómeno
electromagnético
que
tiene
una
importancia
primordial
al
establecer
las
mediciones
fundamentales
de
espacio
y
tiempo
en
que
se
basa
la
mecánica.
1.
LA
LUZ
COMO
MOVIMIENTO
ONDULATORIO
1.1
LA
LUZ:
ONDAS
FRENTE
A
PARTÍCULAS
En
las
antiguas
civilizaciones
(egipcios
y
griegos)
se
conocían
empíricamente
tres
propiedades
de
la
luz:
propagación
rectilínea,
la
reflexión
y
la
refracción.
Las
teorías
existentes
en
esa
época
eran
más
teorías
sobre
la
visión
que
un
intento
de
establecer
unas
bases
sobre
la
naturaleza
íntima
de
la
luz.
Una
de
las
escuelas
postulaba
que
los
ojos
emiten
unas
“antenas
o
elementos
sensibles”
que
son
capaces
de
“palpar”
los
objetos
que
se
encuentran
lejanos:
es
la
teoría
táctil
(Pitágoras,
Euclides
Ptolomeo).
Otras
escuelas sostenían
que
los
objetos
brillantes
emiten
“algo”
que
al
entrar
en
el
ojo,
excita
ciertas
partes
del
mismo,
produciéndose
la
visión;
es
la
teoría
de
la
emisión
(epicúreos,
Platón
Aristóteles).
Estas
teorías
se
mantuvieron
hasta
alrededor...
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