Tarialys Santana Torres
MHSA 672
Prof. Didimio Barreto
GUARDIOLA ALVAREZ V. DEPARTAMENTO DE LA FAMILIA 2009TSPR041
Materia: Derecho Laboral, Procedimiento Especiales.
Hechos:
El señor José R. Guardiola Álvarez (demandante-recurrido) empleado del Departamento de Familia, pidió un acomodo razonable por situaciones de salud, específicamente de sus ojos. Después de haber hecho todas lasgestiones para solicitarla el Departamento no se la concedió y el señor Guardiola presentó ante el Tribunal de Primera Instancia una demanda contra el Departamento de la Familia y el Estado Libre Asociado de Puerto Rico en la cual alegó discrimen por discapacidad bajo la Ley Núm. 44, supra. Solicitó como remedio que la parte demandada realizara el acomodo razonable provisto por la referida ley. Ademásreclamó una indemnización por los daños que, según sus alegaciones, le ocasionaron los actos culposos y negligentes de la parte demandada.
Controversia:
El Tribunal Supremo tiene que resolver si en una acción por discrimen en el empleo instada bajo las disposiciones de la Ley Núm. 44 del 2 de julio de 1985 procede que el Estado responda por una suma igual al doble del importe de los daños sufridospor el demandante. Tiene que determinar si la responsabilidad civil del Estado se extiende a la doble penalidad incorporada como remedio bajo la referida ley, a pesar de que la Ley Núm. 104 de 29 de junio de 1955 (Ley. Núm. 104), según enmendada, 32 L.P.R.A. secs. 3077 et seq., prohíbe la imposición de daños punitivos contra el Estado.
Decision del Tribunal Supremo:
Resolvió que bajo la LeyNúm. 44, supra, el Estado tiene que responder por una suma igual al doble del importe de los daños sufridos por el señor Guardiola Álvarez hasta el tope de $75,000.00 establecido por la Ley Núm. 104.
MORALES BENGOCHOA V. BANCO POPULAR 2008TSPR073
Materia: Derecho Laboral, despido ilegal, danos y perjuicios
Hechos:
El peticionario, señor Heberto Morales Bengoechea, , laboró como empleado en elárea de pagador-receptor en una sucursal del Banco Popular de Puerto Rico, en adelante BPPR, localizada en Barrio Obrero. El 26 de abril de 1985, este presenció un asalto ocurrido en el área de pagador-receptor a su cargo. A partir de este incidente, comenzó a padecer episodios de asfixia y ansiedad. En un principio atribuyó estos síntomas a alguna condición fisiológica o respiratoria, por lo quebuscó atención médica de generalistas. Sin embargo, no se le diagnosticó condición física alguna que causara los síntomas expresados, hasta que finalmente fue referido a un médico siquiatra.
En 1986, el señor Morales, dirigió una misiva al BPPR en la que notificó la condición que estaba padeciendo y a su vez, solicitó ser trasladado a otra sucursal por razones de salud. Dicha petición no le fueconcedida.
Así las cosas, el señor Morales continuó bajo tratamiento psiquiátrico privado, el cual consistía principalmente en terapias y medicamentos. Tres años después, peticionó nuevamente al BPPR un cambio de posición como pagador-receptor y explicó que, las evaluaciones médicas reflejaron que el manejo de dinero y personal de un modo directo le producía mucha ansiedad.
Controversia :
El señorMorales fue asaltado en horas laborables y como tal este se amparó de que esto le creo danos y necesitaba acomodo razonable. Este ofreció para sostener la alegada violación a su derecho de intimidad, que la vicepresidenta de la División de Recursos Humanos, la licenciada Emily Arean, se dirigió a las oficinas del FSE para solicitar que reabrieran el caso siquiátrico de su empleado. El señorMorales alegó que, con dicha actuación se pretendió manipular su información médico confidencial con el propósito de alargar su tratamiento médico y posteriormente justificar su despido
Decisión del Tribunal Supremo:
La única prueba que el señor Morales ofreció para sostener la alegada violación a su derecho de intimidad, fue el hecho de que la vicepresidenta de la División de Recursos Humanos,...
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