aduanas

III. Políticas Y PRÁCTICAS comercialES, por MEDIDAS
1) Introducción
1. Desde el anterior examen de sus políticas comerciales, en 1999, Filipinas parece haber impulsado relativamente poco su programa de reforma económica y liberalización del comercio adoptado en el decenio de 1980. No obstante, la reciente renovación del mandato político del Gobierno, sumada a un crecimiento económicofavorable, ofrece a Filipinas una oportunidad única de romper con el pasado y proseguir el programa de reforma económica. Con ello mejoraría, mediante el estímulo de la competencia, la eficiencia de los productores nacionales y su capacidad a largo plazo de competir contra las importaciones y en los mercados de exportación. Es crucial que Filipinas aproveche esta oportunidad de reformar su régimencomercial, que no sólo sigue siendo restrictivo, sino también imprevisible y complejo, lo cual menoscaba su transparencia y ofrece un margen considerable para la discrecionalidad administrativa y para consecuencias no comerciales.
2. Los obstáculos a la importación siguen constituyendo un importante impedimento a la competencia en la economía y, por tanto, a la mejora de la productividad de losproductores nacionales. Entre los principales obstáculos a la importación figura el arancel, que también continúa siendo una fuente sustancial, aunque decreciente, de ingresos fiscales. En 2001, la reducción planeada de los tipos NMF aplicados (al 0-5 por ciento en 2004 con algunas excepciones) en el marco del Programa de Reforma Arancelaria empezó a ser al menos parcialmente replanteada, a finde "volver a calibrar" los tipos y elevar algunos de manera selectiva a fin de promover el desarrollo industrial. En gran medida, esto se hizo en respuesta a la presión política de productores protegidos y otros grupos de interés y para reducir las pérdidas conexas de ingresos fiscales. Se elevaron muchos tipos arancelarios que habían sido reducidos, sobre todo a partir de finales de 2003. Así,la media aritmética del tipo NMF aplicado descendió del 9,7 por ciento en 1999 al 5,8 por ciento en 2003, pero aumentó al 7,4 por ciento en 2004; esta cifra aún es baja si se tienen en cuenta los niveles de los países en desarrollo. La enorme diferencia existente entre los tipos aplicados y consolidados provoca cierto grado de imprevisibilidad arancelaria dado que ofrece un margen sustancialpara elevar los tipos aplicados. También mengua la previsibilidad arancelaria el poder discrecional de que dispone la Presidencia para elevar los tipos NMF aplicados al 100 por ciento cuando lo estime necesario, posiblemente no respetando las consolidaciones arancelarias. Siguen existiendo algunas exenciones arancelarias de tipo general y por sectores específicos. Su recorte reduciría lacomplejidad arancelaria y compensaría el descenso de los ingresos causados por la reducción de los aranceles. Todos los aranceles tienen tipos ad valorem, lo que contribuye de manera importante a la transparencia y la previsibilidad.
3. Los obstáculos no arancelarios a las importaciones, en especial los regímenes de licencias y los permisos, afectan a cierto número de productos, principalmente porrazones sanitarias o de seguridad. Siguen estando prohibidas las importaciones de algunos productos (por ejemplo, madera autóctona), y unos cuantos productos particularmente sensibles (por ejemplo, el arroz y al parecer el pescado y los productos de la pesca) están sujetos a contingentes de importación. Además, el Presidente puede prohibir las importaciones de productos procedentes de cualquierpaís que ejerza discriminaciones contra las exportaciones filipinas. El sistema de licencias conexo es opaco y parece muy complejo. Se han promulgado nuevas leyes para regular el uso de medidas especiales basadas en disposiciones de la OMC. Las normas y reglamentos técnicos nacionales parecen obedecer en lo posible a directrices internacionales, y desde 1999 ha aumentado el número de normas...