Albores Del Paraiso

Albores del paraíso
Frondosa vegetación
esplendorosos jardines…
alfombras de macachines
y campos en floración,
puso en la sacra mansión
nuestro Señor con afán;
quiso un día muy chichón,
comoun héroe sin derrotas,
poner a Eva en pelotas
junto con el rubio Adán.-
Luego en tono misterioso
habló con Adán a solas
y mostrándole las bolas
le dijo: no seas goloso;
eso que ves tan hermosoy ese robusto tripón,
cuando a Eva en un rincón
veas jugar con sus tetas,
nunca jamás se lo metas,
ni siquiera con condón.-
La voz divina cayó
y Adán, lleno de sonrojo,
bajó afectado los ojosy así nomás se quedó;
largo rato meditó,
invadido por la duda:
¡está tan linda desnuda!
-suspiró con gesto tierno-
¡me ha jodido el padre eterno,
porque Eva está macanuda ¡
Y acatando losconsejos
que les diera el viejo Dios,
solo pasaban los dos
mirándose desde lejos;
y a veces, medio perplejos,
igual que cualquier bobeta,
se estudiaban la silueta,
y como no tenían encono,
Adán sehacía la del mono
y Eva se hacía la puñeta.-

Pero una tarde estival
en la puerta de una cueva,
Adán se encontró con Eva
dormida en un pastizal;
en su cuerpo virginal,
en sus formasvoluptuosas,
en sus mejillas hermosas
y en sus senos tentadores,
vio Adán en mil colores
una multitud de cosas.-
Sintió su sangre correr
en frenético alboroto,
y se le paró el poroto
sin poderlocontener;
ante el cuerpo de mujer
vibró su alma de cojudo,
y su cipote morrudo
cuando Eva estaba quieta,
se lo enterró en la cajeta
como en la tierra el peludo.-
Eva nerviosa dio un grito
alsentirse perforada,
y en feroz atropellada
acabó Adán fatigado,
y cayó sobre un costado
con la pija ensangrentada.-
Supo el Señor el pecado
cometido por Adán,
y estalló como un volcán
su furordesenfrenado:
¡Infame! -dijo- has osado
romper ese virgo santo,
y yo que te previne tanto
de que no te la cogieras ¡
¡ vete, vete con las fieras
que me produces espanto ¡.-

Y esa mujer deshonrada...