Arte y pedagogía

Ensayo

Arte y pedagogía
Desde el estudio de algunos enunciados

Por:

Carlos Mario Jaramillo Ramírez

Medellín enero 25 de 2008
Introducción

Transitar los conceptos que describen las relaciones entre arte y pedagogía en un contexto histórico determinado, implica en principio, un ejercicio interpretativo[1] que recorra el sistematismo habitual de los discursos en donde circulan laestética, la historia del arte, la educación y la pedagogía. Con el fin de reconocer las funciones de sus enunciados y establecer las proposiciones que han dimensionado las prácticas del arte. Se hace necesario transversalizar tensiones a través de la configuración de cartografías que encuentren verdad en la diversidad de sus coordenadas.

La disposición del término “interpretar” que proponeFoucault en la Arqueología del Saber, sitúa su posición en una crítica a la hermenéutica que supone una subjetividad fundadora[2]. La Arqueología es un esfuerzo por establecer diferencias con el proyecto interpretativo de la hermenéutica tradicional, inferida básicamente en la propuesta de Dilthey. Este ejercicio superpone al concepto nuevas coordenadas que exploran tensiones y relacionesdiscursivas que pueden ampliar la noción de archivo y por lo tanto reflexionar la discursividad histórica y estética. Este alejarse de la definición de interpretación, obliga en sumo a responder a su nuevo devenir en la terminología de Foucault, en donde “la superficie es el nuevo lugar de inscripción”, porque la interpretación queda espacializada en el enunciado[3]. Interpretar es un ejercicio estratégicoque destruye la concepción histórica del término, que se articula posteriormente de un modo negativo cuando propone que: “Si la interpretación no puede acabarse nunca, es simplemente porque no hay nada que interpretar. No hay absolutamente nada primario que interpretar, pues en el fondo todo es ya interpretación, cada signo es en si mismo no la cosa que se ofrece a la interpretación, sinointerpretación de otros signos.”[4]. Es por eso necesario desbrozar las relaciones de otras arqueologías propuestas al final de la Arqueología del Saber para identificar el movimiento de lo estético en el cambiante espacio del arte, en consecuencia identificar históricamente los signos que de él intenta incorporar el régimen de signos que la pedagogía elabora en su relación con la imagen.[5]

En lapropuesta de investigación se podrá comprender como en la relación arte pedagogía se pueden estructurar regularidades históricas de lo que ha sido dicho, (en la crónica histórica, la literatura, la plástica y la música) de lo que se ha representado al saber del arte como verdad (el discurso formador del arte, su imagen y la crítica a la fenomenología de Husserl) y de la singularidad social queha marcado su permanencia y transmisión (el predominio de la técnica en el proyecto cultural, social y educativo en sus máquinas eficaces y moles estancadas que perviven heterogéneamente en las llamadas artes audiovisuales). Elementos para proponer trayectos en una cartografía que despliegue el acto de mirar como acontecimiento teórico que despliega estructuras conceptuales entre las palabras ylas cosas. “remontarse desde los enunciados conservados al hilo del tiempo y dispersados a través del espacio, hacia ese secreto interior que los ha precedido, que se ha depositado en ellos y que en ellos se encuentra…”[6], este señalamiento al contenido del archivo como develamiento de lo que siempre ha estado, y que se despliega constantemente en la figura de lo evidente, obedece paradójicamente asu configuración fragmentaria y emergente. Fundar el archivo es respuesta a la necesidad de liberar la interpretación del núcleo de la subjetividad fundadora, en la cual Foucault acusa a la hermenéutica de pretender un sujeto interpretante que esta por fuera del discurso, por lo tanto que lo inventa o lo transforma sólo en su dimensión teleológica.

Establecer para la investigación una...