BOGOTA
Laconsolidación del proceso urbano de este tipo de desarrollos en terrenos aislados y no urbanizables, depende de las inversiones paulatinas de los habitantes en la autoconstrucción de sus viviendas, con locual el logro de relativas condiciones de habitabilidad en la escala urbana y arquitectónica se obtienen a largo plazo. Pero también está supeditado a la capacidad de autogestión de la comunidad, enla medida en que de ella dependen la regularización y dotación de servicios públicos domiciliarios. Sin embargo, la forma urbana que se acaba configurando, presenta similitudes a las de los barriosde vivienda social en la medida en que se utiliza y se disponen los lotes de forma parecida (Cortés y Salazar, 1993). Así, la vivienda de origen clandestino es una opción viable que compite con laoferta formal, al brindar una calidad potencial al alcance de un gran sector de la población.
los barrios de Vivienda de Interés Social, desarrollados desde inicios de los noventa, también han incididoen el crecimiento urbano de la periferia bogotana. Su construcción por iniciativa individual en predios de diversas formas y tamaños, bajo el simple cumplimiento de normas regidas por la racionalidaddel mercado, a la larga, ha consolidado una periferia deficitaria de equipamientos y espacio público, y con insuficientes conexiones con la ciudad.
Si bien los barrios de origen clandestino hanaparecido en áreas mucho más periféricas y aisladas, con el tiempo, el crecimiento de la ciudad y la consolidación de su proceso tipológico acaba por convertirlos en un barrio más, aunque sigan...
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