Características de la deuda externa de méxico

Salas Puerto Stephany.
Características de la deuda externa de México

En este ensayo, se analizará una parte de la historia de la deuda pública a partir de 1980 y a la fecha con el fin de brindar un bosquejo práctico de lo que es la deuda y especialmente contextualizar los efectos de ésta en la realidad actual mexicana, sin dejar de lado que el periodo de la deuda externa de México ha tenidouna larga historia que comienza en el año de 1821, y que se ha caracterizado por manifestarse en ciclos definidos de crisis de deuda, de duración tendencialmente sexenal, especialmente desde los años cuarenta.
El endeudamiento en México ha definido las relaciones económicas con el exterior; José Antonio Ibáñez menciona sobre este punto que “la causa final del endeudamiento externo es la posiciónde debilidad del país frente a sus relaciones con el exterior, particularmente con los países desarrollados, ésta es la causa estructural o de fondo más importante del endeudamiento externo”[1].
La falta de ahorro interno fue uno de los factores que contribuyen a la generación del endeudamiento externo en México.
Uno de los antecedentes en la problemática del endeudamiento externo fue lasituación fiscal del inicio del gobierno de López Portillo en la que el petróleo era base fundamental de la economía y por esto se contrató deuda para construir plataformas marítimas y así se incorporó a la deuda pública, no sólo la del gobierno sino la de las empresas descentralizadas (en especial PEMEX), aquella se triplicó de 19,600 millones de dólares en 1976 a 58,874 millones en 1982. Esto indica queMéxico contrató deuda para producir petróleo y ahora lo usa para pagar parte de la deuda que contrató para producirlo.
En agosto de 1982 México se declaró incapaz de cubrir el servicio de la deuda externa, se encontraba en una coyuntura de frágil recuperación y amplio déficit comercial. Por esta razón, el país inicia en 1984 nuevas negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y labanca comercial tendientes a reprogramar la deuda a más largo plazo.
Durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, permaneció el mismo problema, el objetivo era resolver el estancamiento económico: la tasa de crecimiento promedio del producto interno bruto (PIB), en los seis años anteriores, fue prácticamente nula con serios efectos sobre la generación de empleos y el poder adquisitivo delos salarios, por ello, se consideró que si bien el motor del nuevo crecimiento podría generarse por el ahorro interno, en lo fundamental, la recuperación económica no se lograría mientras no se resolvieran los compromisos adquiridos en relación con la deuda externa.
Al inicio del sexenio 1988-1994, “el saldo de la deuda externa total ascendía a 100.384 mil millones de dólares: 81.3 milmillones de dólares correspondían al sector público; 7.114 mil millones de dólares al sector privado; 7.481 mil millones de dólares a Sociedades Nacionales de Crédito (incluyendo créditos interbancarios) y 4.786 mil millones de dólares al Banco de México”[2]. A finales de la administración salinista, el PIB no llegó a crecer de manera sostenida, la reducción del nivel de vida por la contención deprecios, la fuga de capitales y la pérdida de confianza de los inversionistas llevaría de nuevo al sobreendeudamiento.
Después de la negociación de 1989, la deuda externa de las empresas privadas bancarias y no bancarias comenzó a crecer de manera acelerada en los años siguientes, según la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a finales de 1994, el saldo de la deuda pública externa de cortoplazo, incluyendo TESOBONOS[3], representaba el 31% de la deuda pública externa total.
Durante 1994 no se tenían recursos para cubrir las obligaciones en materia de deuda, lo que aunado a la disminución de flujos de capital hacia el país contribuyó a desatar la crisis económica a partir del 20 de diciembre de ese año. Crisis que implicó salida de capitales, devaluación del peso, incremento de la...