CONFLICTOS
Cachemira es para India prueba de su «unidad en la diversidad», al tratarse del únicoEstado de mayoría musulmana en su territorio; perderlo podría crear un mal precedente frente al separatismo en otras regiones. Para Pakistán representa lo que considera una parte de él en manos de suarchienemigo, una herida abierta que sólo sanaría con la anexión de Cachemira.
Más allá de la religión islámica, el reclamo por Cachemira es, probablemente, el único punto que cuenta con un consensocasi unánime en la opinión pública paquistaní, dividida por hondas diferencias étnicas y culturales. Por ello el tema es más difícil de manejar para Islamabad que para Nueva Delhi, en términos depolítica interna.
El régimen militar de Pervez Musharraf ha podido compensar en parte la impopularidad de su apoyo a la agresión estadounidense a Afganistán, al mantener el respaldo al separatismo deCachemira. Islamabad está también presionado por sus sectores extremistas ante la derrota del régimen talibán en Afganistán y la asunción de un gobierno con fuerzas apoyadas por la India.
NuevaDelhi ha utilizado la coyuntura de la «cruzada» estadounidense contra el terrorismo, para llamar la atención internacional sobre el apoyo de Islamabad a los separatistas y para exigir de éste que le pongafin.
Es incongruente que Pakistán sea socio privilegiado de la coalición antiterrorista internacional y que al mismo tiempo envíe activistas, entrenados hasta hace poco por Al Qaeda en...
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