Convivimos, no solo coexistimos

Caso: “Convivimos, no solo coexistimos” .

Teniendo en cuenta que las sociedades actuales son “moralmente pluralistas” y lapersona humana todo el tiempo se enfrenta a elecciones a partir de decisiones; es necesaria la existencia de un ente orientador en la manera de obrar de la gente que tenga en cuenta toda esta diversidadmoral y oriente siempre en contribuir con una sociedad justa y equitativa.

El intento de reflexión constante sobre el fenómeno de moralidad en conjunto o la moral en la vida cotidiana y tratar defundamentarla, es lo que se denomina la ética, sin embargo, ha surgido la necesidad de descubrir o construir permanentemente aspectos de la moral que se evidencian más claramente en la vivencia y no seencuentran claramente fundamentados, pues son una combinación de aspectos variables relacionados con el mundo que vive cada persona en cada instante de su vida.

Si las cuestiones morales estánbasadas en juicios de valor de cada ser humano, en construcciones a lo largo de su vida no solo de la religiosidad, y sino posiblemente también, de las instituciones de la sociedad, de las vivencias, etc. oincluso según Aristóteles, donde “a juicio moral se llega por experiencia, incluso por percepción directa” y teniendo en cuenta, además, que el ser humano interactuando en sociedad en diferentesámbitos podría ajustar o modificar sus aspectos morales a través de decisiones, dependiendo de las circunstancias, ambiente o cultura, es decir la manera de interrelacionarse, decidir y obrar se conformaasí, sobre una base moral dinámica, entonces quien sería entonces el llamado a realizar esta formalización o construcción, teniendo en cuenta que los aspectos morales son adquisiciones individuales?Es entonces, en la diversidad, en el pluralismo moral y en instancias sociales, donde se dan espacios para la construcción de respuestas pensadas interdisciplinariamente, a través, del debate y...