cuentos
Hans Christian Andersen
Entre los mares Báltico y del Norte hay un antiguo nido de cisnes: se llama Dinamarca. En
él nacieron y siguen naciendo cisnes que jamás morirán.
Entiempos remotos, una bandada de estas aves voló, por encima de los Alpes, hasta las
verdes llanuras de Milán; aquella bandada de cisnes recibió el nombre de longobardos.
Otra, de brillante plumaje yojos que reflejaban la lealtad, se dirigió a Bizancio, donde se
sentó en el trono imperial y extendió sus amplias alas blancas a modo de escudo, para
protegerlo. Fueron los varingos.
En la costa deFrancia resonó un grito de espanto ante la presencia de los cisnes
sanguinarios, que llegaban con fuego bajo las alas, y el pueblo rogaba:
- ¡Dios nos libre de los salvajes normandos!
Sobre elverde césped de Inglaterra se posó el cisne danés, con triple corona real sobre la
cabeza y extendiendo sobre el país el cetro de oro.
Los paganos de la costa de Pomerania hincaron la rodilla, y loscisnes daneses llegaron con
la bandera de la cruz y la espada desnuda.
- Todo eso ocurrió en épocas remotísimas - dirás.
También en tiempos recientes se han visto volar del nido cisnes poderosos.Hízose luz en el aire, hízose luz sobre los campos del mundo; con sus robustos aleteos, el
cisne disipó la niebla opaca, quedando visible el cielo estrellado, como si se acercase a la
Tierra. Fue elcisne Tycho Brahe.
- Sí, en aquel tiempo - dices -. Pero, ¿y en nuestros días?
Vimos un cisne tras otro en majestuoso vuelo. Uno pulsó con sus alas las cuerdas del arpa
de oro, y las notas resonaronen todo el Norte; las rocas de Noruega se levantaron más altas,
iluminadas por el sol de la Historia. Oyóse un murmullo entre los abetos y los abedules; los
dioses nórdicos, sus héroes y sus noblesmatronas, se destacaron sobre el verde oscuro del
bosque.
Vimos un cisne que batía las alas contra la peña marmórea, con tal fuerza que la quebró, y
las espléndidas figuras encerradas en la...
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