Daniel Es Hora De Ir A La Cama
-¡Daniel es hora de ir a la cama! –dijo mamá -.
Tu sabes, mi amor, que los niños deben dormir temprano para encontrarse con el mundo delos sueños.
A Daniel no le agradaba la idea. Él queríaseguir jugando con su perro llamado chango Chango y con los juguetes Que había recibido por su cumpleaños. Refunfuñaba y lloraba, pero de dormir, ni hablar.
Le parecía una pérdida de tiempo, y ademásla oscuridad lo asustaba.
Sin más jarabe, y ya que mamá se estaba enojando, Daniel se cepillo los dientes, se puso la pijama espacial, y ‘’a la cama’’.
Su mama le dio un beso y le dijo:- Quesueñes dulcemente, mi amor.
Daniel cerraba sus ojos intentando dormir.
Sedaba vueltas y vueltas, y contaba ovejas.
De pronto, comenzó a escuchar una música muy divertida que salía de su armario.
Parecíauna gran fiesta. Con mucho cuidado, Daniel se acercó la puerta y… ¡HUUAUUU!
¡Que increíble!’’ Vio un camino largo y colorido que brillaba como miles de estrellas luminosas.
Sin dudarlo un momento,entro al armario de un salto, corrió por el canino y vio un carrusel con caballos de grandes alas blancas.
Se subió en él y los caballos comenzaron a mover sus alas. ¡El carrusel se elevó por losaires!
-¡Que maravilloso!-Daniel no lo podía creer. Vio gigantes torres de caramelo, naves espaciales con muchas luces de colores, hermosas sirenas bailando en un mar violeta, y muchos sapos cantadoresque lo saludaban al pasar.
De pronto, una nube de algodón se acercó al carrusel.
Daniel se despidió de los caballos y rápidamente se trepó en ella. A la distancia, escuchó ladridos.
¡Era Chango, superro¡ Y estaba jugando con una amiguita en un mágico parque de diversiones.
-¡Ahí voy¡-Gritó Daniel; saltando de la nube, flotó por el aire hasta caer suavemente a lado de Chango.
-Hola , ¿estás bien?-le preguntó su perro.
-Sí- contestó Daniel sorprendido-.!Puedes hablar, que increíble ¡
Chango, riendo, le contestó:
-Es que aquí en el mundo de los sueños todo es posible. Mira Daniel, te presentó...
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