daniela

En este pueblo no hay ladrones
(Dámaso entra)
Narrador: Ana su mujer, embarazada de 6 meses lo esperaba sentada
Fijo sus ojos en el bulto que él llevaba en la mano
Ana se levanta
Narrador: Ella abrazo a Dámaso llorando
Ana: me dormí sentada
Dámaso se para
Dámaso se fue a orinar al patio
Ana desenvuelve la tela roja que llevaba Dámaso
Encontró 3 bolas de billar 2 blancas y una rojaestropeadas
Dámaso vuelve
Ana: ¿y esto para qué sirve?
Dámaso: para jugar billar
Lo envolvió y lo guardo en el fondo del baúl
Ana se acuesta
Dámaso se acuesta con ella, saca un cigarro
Dámaso: ¿en qué piensas?
Ana: en nada
Dámaso aplasto el cigarro en el piso
Dámaso: no había más nada
Ana: han debido pegarte un tiro
Dámaso: maldita sea
Busco los cigarrillos y los fósforos
Ana: tienesentrañas de burro y todo para salir con 36 bolas de billar
Dámaso: en la gaveta solo había 25 centavos
Ana: no debiste traer nada
Dámaso: no podía venirme sin nada
Ana: allá hay muchas cosas
Dámaso: así parece pero la realidad es que no, cuando empiezas a registrar te das cuenta de que no hay nada que valga la pena
Ana: tal vez
Dámaso volvió a fumar
Ana ¿estabas muy asustado?
Dámaso: ¿yo?Un poco
Ana: fue una locura
Dámaso: para ser la primera vez no me fue tan mal
Narrador: en sol calentó tarde, Dámaso despertó su mujer ya estaba levantada su cuarto formaba parte de una galería de cuartos iguales e independientes
Ana había instalado un anafe para cocinar y planchar
Vio a Dámaso quito las planchas y empezó a calentar café
Ella era mayor que él, de piel pálida
Ana: no hanhabado de otra cosa toda la mañana
Ana sirve el café
Mientras tomaba café Ana colgaba la ropa al final Dámaso encendió un cigarro y se fue
Dámaso enciende un cigarro
Teresa llamo, contesto una muchacha
Dámaso: ¿qué pasa?
Muchacha: se metieron en el salón de billar y robaron todo
Narrador: la muchacha parecía informada
Muchacha: se llevaron todo hasta desmantelarlo y llevarse la mesa debillar
Dámaso: mierda
Narrador: 3 meses antes Dámaso cumplió 20 años y se sintió adulto
Cuando Ana acabo de planchar salió a la calle
Dámaso: no te demores
Ana: allí te deje la camisa de cuadros, no te vuelvas a poner la franela no sabemos quién te vio
Dámaso: nadie me vio
Ana: no sabemos, es mejor que no salgas
Narrador: no se hablaba de nada distinto en el pueblo cuando Ana acabo de repartirla ropa se fue a la plaza, no encontró a tanta gente, eran las doce y hacía mucho calor
Ana siguió por el salón de billar, un momento después miro fijamente una puerta violada el candado estaba intacto pero una de las argollas había sido arrancada
Ana: ¿quien fue?
Forastero: no se sabe
Mujer: tuvo que ser EN ESTE PUEBLO NO HAY LADRONES todo el mundo conoce a todo el mundo
Ana: así esNarrador: Ana empapada de sudor
Ana: ¿le llevaron todo?
Viejo: doscientos pesos y las bolas de billar
Ana: así es se puso un trapo en la cabeza y se fue
Narrador: el dueño del salón de billar estaba en la puerta con 2 agentes él era bajo y redondo con unos anteojos como los que hacen los niños
La multitud lo rodeo
Ana escucho su información y después fue regreso al cuarto congestionada
Estiradoen la cama
Dámaso: ¿cómo hiciste para esperarme sin fumar?
Aplasto el cigarro en la tierra
Dámaso: ¿entonces?
Ana: además de ladrón, embustero
Dámaso: ¿por qué?
Ana: me dijiste que no había nada en la gaveta
Dámaso: (enojada) no había nada
Ana: Habían 200 pesos
Dámaso: mentira (molesto)
Ana: no seas bruto, dicen que el forastero llego el jueves y anda dando vueltas, no lo pudieronagarrar
Ana: puede ser que allá ido (sarcástica)


Narrador: Dámaso, necesito 3 horas para arreglarse

Ana: lo agarro por las muñecas

Ana: ¿tienes monedas?

Dámaso: soy rico. (De buen humor) -. Tengo los 200 pesos

Narrador: ana se volteo, saco un rollo de billetes, y le dio un peso a su marido
, aquella noche, Dámaso estuvo en la plaza con el grupo de sus amigos, los amigos de Dámaso...