De Todo Un Poco
Tiempo atras eramos como dostontos, ahora somos completamente subnormales. Ha vuelto. Volvieron tus noches conmigo, nuestras inmensas palabras, nuestros jajaja y nuestros recuerdos del pasado.Hace años de esto. Mi pequeña madurezde entonces no supo mantenerte hasta hoy, pero sabes caminar por tu propio pie. Y desde que has llegado de nuevo yo tengo mi mano tendida. No suelo contarte mis penas no suelo ahogarlas. Desde que tullegaste no hay penas. Suelto mi gran e indiferente carcajada cuando algo me proboca tu recuerdo. Mis ojos comienzan a soltar ese brillito cautivador y tu sonries como si estuvieses esperando a queestos ojos cautivadores de vijilen, te sorprendan observandome. Pero ellos se esconden una y otra vez tras el parpado que se habre y cierra muy lentamente y con un toque de picardía. Ellos tambien tebuscan a ti.
Bajo mis parpados por completo los mantego cerrados durante un tiempo, debe ser cuention de minutos y cuando muy detenidamente deciden abrirse, ahí estas, delante mío, besandome de unamanera apasionada. Deseando no soltarme, me aferro a ti para sentirte y comienzas a apretarme, me mantienes agarrada por la cintura y cada vez mas fuerte. No me sueltas, no quieres soltarme, pero estábien. Ya basta. Me separo de ti, dejemos de besarnos de una vez. Tus ojos se habren con pausas. Sonries satisfecho, pero no por haberme tenido, sinó porque me quieres demasiado como para dejarme ir.Recojes tu mochila del suelo y juntos salimos de aquel lugar, a partir desde entonces, nuestro lugar.
Caminamos derechos, yo solía caminar por encima de aquel bordillo que más de una vez me hizo...
Regístrate para leer el documento completo.