Decalogo Del Abogado

Decálogo del Abogado.

1º. No pases por encima de un estado de tu conciencia.
“En el Abogado la Rectitud de la conciencia es mil veces mas importante que el conocimiento.”
Y es que en realidad uno no puede pasar por encima de lo que le dicta del interior, mas aya de los conocimientos adquiridos o aquellas realidades que percibimos y vivimos, es nuestra conciencia, es decir,ese sentimiento interno que nos lleva a sentirnos orgullosos o bien avergonzados de las acciones realizadas. Y es por esto que sin importar la cantidad de conocimientos adquiridos durante la carrera, la cantidad de litigios ganados o bien la fama y el reconocimiento que se tenga de parte de la sociedad, podrán estos en algún momento sustituir la rectitud de la conciencia.
Sepodrá fingir ante quien nos rodea, pero nunca se tendrá como escapar d e uno mismo, pues somos quienes al final del día y al cerrar la puerta sabemos en realidad si las acciones tomadas fueron encaminadas por la razón, por la verdad y por la rectitud.
Es por esto que como bien señala Osorio, es menester tener como principio la conciencia.

2º. No afectes una convicciónque no tengas.
“Cuando un abogado acepta una defensa, es porque estima que la pretensión es justa; y en tal caso al triunfar el cliente triunfa la justicia, y nuestra obra no va encaminada a cegar sino a iluminar.”
El fin de todo litigio es buscar la justicia, y si este no es el fin que perseguimos erramos de profesión. El hombre debe buscar conservar y luchar por su conviccionessiempre, y desdichado será el que no lo haga o remate a las mismas al mejor postor.
Quien carece de convicciones carece también de carácter y quien no tiene carácter ni estima no deberá ejercer tan bella profesión; como se podrá esperar que se respeten la teoría y las creencias del otro si no se conocen y respetan las propias.

“ El abogado no es Proteo, cuyas cualidadesvarían cada día según el asunto en que ha de intervenir. Es un hombre que ha de seguir su trayectoria a través del t tiempo y que ha de poseer y mantener una ideología, una tendencia, un sistema, como todos los demás hombres; no tantas fórmulas de pensamiento y de afección como clientes le dispensen confianza.”
Debemos recordar que el hombre no cambia de pensar y de sentircomo cambia de saco, que siempre se debe de seguir la trayectoria que se emprende, a menos claro, que en el trayecto mismo encontremos que nos hemos equivocado. Pero de no ser así, debemos ser congruentes con lo que se piensa y con lo que se defiende, pues no debemos bajo ninguna circunstancia ir contra de nuestras convicciones, y si lo hiciéramos seria tanto como llevar un casoen contra de nosotros mismos, el cual irremediablemente nos llevaría a perder el caso; tal vez no en tribunales pero si uno mas importante, con nosotros mismos.
3º. No te rindas ante la popularidad ni adules a la tiranía.
“Debajo de la toga hay que tener coraza. Abogado que sucumba al que dirán debe tener su hoja de servicios manchada con la nota de cobardía.”
Si como abogadonos dejamos guiar por lo que se dice por ahí, entonces caeremos en el mas grave error, pues las habladurías existirán siempre para bien y para mal, habrá quien admire nuestro trabajo y abra quien no lo haga. Habrá quien señale nuestras virtudes y quien por contrario pretenda destrozarnos por nuestros errores.
La inteligencia del abogado esta en saber cual es su lugar yaprender que la popularidad de la que puede gozarse, es también pasajera. Se debe amar el trabajo tan noble que es la abogacía y nunca dejar que las mieles de este nos distraigan demasiado, pues peor que caer en el juego de aceptar complacencias es dar estas mismas, y lamentablemente aquellos que las reciben en exceso se convierten poco a poco mas en déspotas y menos en seres...