Derecho Laboral: La Necesidad De Un Digesto

Mientras en nuestro país se debate sobre la necesidad de modificar el Código Civil y el Código de Comercio, y desde sectores del poder se avizora una impronta modificatoria de la Constitución Nacional, en los Juzgados Nacionales y Tribunales provinciales del fuero laboral, la necesidad es otra.

La estadística indica que poco mas del 15% de las normas existentes a nivel nacional se encuentranvigentes. En el ámbito laboral, según el Dr. Hector Recalde “En nuestra materia se han detectado normas cuya vigencia medida en cantidad porcentual de artículos en relación a la cantidad original es tan sólo del 5%.”
La Ley 24.967 que promueve la creación de un Digesto Jurídico en su 7° Artículo, Inc. P, preveé la realización de un Digesto Jurídico Laboral. Dicha Ley, del año 1998, fue relanzadael año pasado por el actual gobierno Nacional con un mensaje dirigido a la Comisión Bicameral creada al efecto. Cristina Fernández calificó de “Impostergable” la labor propuesta, consignando la Presidenta que “El Estado Nacional debe garantizar la unidad, coherencia y plenitud al universo normativo de nuestro país, otorgar certeza sobre la legislación aplicable y permitir el funcionamientoadecuado del ordenamiento jurídico argentino”.
La realidad es otra.
La Ley Nacional de Contrato de Trabajo, la nueva legislación sobre Personal de casas particulares (Servicio Doméstico), el nueva Ley de personal de Trabajo Agrario y las leyes sobre empleo público, conforman sólo la punta del Iceberg jurídico para los trabajadores en relación de dependencia en nuestro país.
Con el paso de los años ylas diversas coyunturas económicas y sociales, se han generado desde el Legislativo y reglamentado desde el PEN, leyes “parche” tendientes a correr detrás de los hechos.
De nada sirve ahora, por cuestiones meramente de actualidad, recordar la reforma impulsada por la Alianza (L. 25.250) y su secuela judicial en marcha, pero de ese hecho se puede mensurar el impacto político que genera eldesempleo, en una sociedad precarizada en tercios: El primer tercio es de empleados públicos varios; el segundo tercio corresponde a empleados en relación de dependencia, y el tercer grupo, corresponde a los empleados informales o “en negro”.

Nada tiene que envidiar el fuero Laboral al fuero Civil o Civil y Comercial según la jurisdicción de que se trate. Las reformas parciales, las interpretativas,las jurisprudenciales, las políticas y las coyunturales han logrado un cúmulo legislativo que resulta ya un obstáculo para la aplicación de un derecho protectorio de raigambre constitucional.
Resulta obvio que por cuestiones de espacio, no podríamos en una breve nota, analizar puntualmente cada uno de los conflictos de todo el andamiaje jurídico y sus consecuencias, pero bien podemos evidenciar lacrisis que se avecinaría en caso de que la economía se enfríe y el mercado laboral se convulsione.

Párrafo aparte merece un replanteo del sistema tarifado impuesto en nuestro país, donde se condena en base a la porción cumplida del contrato de trabajo, y no con un sistema que contemple el incumplimiento por parte del empleador.

La Ley 20.744 con los alcances del Art. 2°, ya fue modificadapor 146 normas y a su vez modifica o complementa otras 13 normas. Esta Ley abarca la mayor parte de las relaciones laborales del ámbito privado.
La Ley 22.250 (con su Decreto Reglamentario 1342/81) que regula el trabajo en el ámbito de la construcción, ya cuenta con 69 normas que la modifican o complementan. Para tener en claro la magnitud de las modificaciones, la norma cuenta con 41 artículos.Por su parte, la Ley Nacional de Empleo, destinada a la protección del trabajo, cuenta con un compendio de 155 artículos y es modificatoria de 5 normas. En la actualidad está modificada por 317 normas.
Este conglomerado normativo resulta insuficiente para dirimir el mínimo de los casos de litigiosidad laboral, y debemos ampliar la lista de normas vigentes y aplicables, con otras normas de...