Derecho Politico

Sin sorpresas Por GABRIEL RAFART 8 de mayo de 2011 La Mañana Neuquén

El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, se sumó ayer a los candidatos presidenciales que declinaron su postulación a la Casa Rosada.


Del terror al mito


No sorprendió a nadie. Como el final trágico del hombre fuerte de Al Qaeda. De acuerdo al impresionante poderío de su oponente, Osama bin Laden tenía una vida contadaen meses, ya no en años como  el tiempo que parecía haber comprado después de los días que siguieron a la incursión militar sobre Afganistán. Al final del camino se impondría la justicia de los vencedores. Una justicia que sabe más a una venganza que sólo los Estados imperiales se atreven a ejecutar. Aunque esta vez el ajusticiado no tuvo la suerte de Saddam Hussein. Tampoco la del panameñoManuel Noriega o la que le tocó en suerte a un olvidado primer ministro de la isla caribeña de Grenada. A estos tres, en algún momento se los “vio” por la TV. También contaron con un cadalso, una tumba o la cárcel. Bin Laden, nada. Sólo la suma de relatos contradictorios acerca de la operación que terminó con su vida. Lo único seguro sería la confirmación de su muerte. Por lo menos así lo señalan losmismos ejecutores como también Al Qaeda.

Para Bin Laden ya vendrá la voz del mito que hablará de su mano justiciera. Como todo converso a una suerte de bandido vengador se lo verá en distintos lugares del mundo dirigiendo tropas irregulares que escarmentará a los infieles occidentales.
Si a los Estados Unidos les costó una década dar con el cuerpo del terrorista saudí,  seguramente el mundo tendráun más largo tiempo para enfrentar el mito que ya está en construcción. Lo curioso es que antes de todo esto los norteamericanos se habían encargado de armar al saudí más conocido para que fuera una de sus piezas en la lucha contra el mundo soviético. De promesa de la CIA a terrorista sangriento para llegar a este nuevo lugar de santo justiciero, ese ha sido y será el itinerario de Bin Laden
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 La política democrática tiene sus trayectorias

Desde la política democrática también se puede transitar por este tipo de recorrido. De hombre promesa seguida de figura negra y luego rosa. El actual tiempo de renunciamiento del ingeniero e intendente porteño Mauricio Macri contiene los tres momentos. Es cierto que la profusa sangre derramada por el hombre de Al Qaeda no es parte de la esencia dela vida democrática. Porque en el mundo de la democracia lo que se derrama y se derrocha es aquello que antes se acumuló. Se gana o se pierde capital político que no es otra cosa que lealtades, compromisos y por sobre todo, voluntad de representar a una porción de ciudadanos.
Volver a ese símil remite a las innumerables defecciones políticas y desaciertos de gestión con que Mauricio Macri haencarado su rol de político de la democracia. A diferencia de Bin Laden los tiempos “Macri” fueron más cortos, medidos no en años sino en semanas. Es que todo se precipitó después de la seguidilla de elecciones distritales que arrancaron en Catamarca. 
Si bien aún no se conocen los argumentos con que Macri explicará su cambio de frente electoral, quedó expuesto de la misma manera que otros que sebajaron de las presidenciales de octubre. Hasta ahora ninguno de los renunciantes elaboró una fundamentación sólida.
Todos dejaron pasar la oportunidad. Sólo quedó flotando la idea de que la política es pura competencia. Que por lo tanto todos, sin importar de qué pelaje se es, están habilitados a demostrar sus aspiraciones. De la misma manera que se puede saturar el firmamento de candidaturas sinrendir cuentas cuando las mismas se retiran. Naturalmente esto es posible por la carencia de un sistema de partidos que contenga a esos líderes y canalice sus aspiraciones en una  disputa más ordenada. Una política sin partidos permite esto y  mucho más.
El diseño de las primarias obligatorias y simultáneas que se realizarán en agosto  atendería esta cuestión de la decantación de candidatos y del...