derecho

J.Lemaitre junio 10 de 2010

¿Constitución o barbarie?
Cómo re-pensar el derecho en las zonas sin ley
Por Julieta Lemaitre Ripoll1
(para salir en: "El derecho en América Latina: los retos del siglo XXI" (CRodriguez,coord.
Buenos Aires: Siglo XXI, 2011).)

Desde hace un par de años empiezo mi clase de Sociología del Derecho con La Sierra,
un documental sobre las comunas de Medellín,Colombia (Martínez y Dalton 2005). La
primera escena es la del cadáver de un muchacho abaleado que es descubierto por la
gente del barrio al amanecer. La gente se aglomera a mirar, llega la novia llorando a
gritos, los chicos recrean la forma como fue asesinado, y eventualmente aparece la
policía recibida con murmullos de “ustedes son los que lo mataron.” No es el único
muerto del documental, quemuestra con intimidad y curiosa frialdad la cotidianeidad de
un barrio y unos muchachos pobres atrapados en la dinámica de la guerra urbana, de la
desesperanza de los jóvenes sin futuro, de la intensidad del sexo, las drogas y las armas.
Salvo la ocasional patrulla motorizada de policías fuertemente armados, el Estado- y el
derecho- están del todo ausentes. Como lo están también de tantosbarrios de tantas
ciudades de América Latina donde la violencia va cambiando de causa –por conflictos
entre pandillas, por comercio de drogas, por proyectos de exterminio racial, político o
social, etc.– pero no de rostro: hombres jóvenes, morenos y pobres.
¿Cuál es la relación entre el derecho que enseñamos en los salones universitarios y la
violencia del documental? En esas primeras clasesintento que mis alumnos planteen
las diversas posibilidades a partir, primero, de su experiencia de chicos de clase media,
y, a medida que avanzan los días y las lecturas, a partir de las diversas definiciones
disponibles del derecho, tanto de la teoría y filosofía del derecho como de la sociología
jurídica. Este ensayo pretende un ejercicio similar: reflexionar sobre la relación entre el
derechoque enseñamos en los salones de clase y la violencia vivida en las calles de los
barrios marginales, las zonas de colonización agrícola, las fronteras del tráfico de
drogas, armas y migrantes, y las demás zonas y espacios públicos y privados “sin dios
ni ley.”

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Profesora Asociada, Facultad de Derecho, Universidad de los Andes. Agradezco a César Rodríguez por
la invitación a participaren la primera reunión de esta red de académicos progresistas del derecho, y a los
presentes por sus amables comentarios a un borrador inicial de este capítulo.

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J.Lemaitre junio 10 de 2010

La reflexión sobre la relación entre derecho y violencia empieza por las teorías
implícitas en las respuestas de mis alumnos. La primera respuesta que dan se remite a
los marcos culturales queexplican estas zonas “sin ley” como zonas de barbarie,
opuestas a la zonas de civilización y legalidad. Su solución suele ser el llamado a una
mayor presencia del Estado (y del derecho) frente a la violencia de las vidas
documentadas, de esos muchachos y muchachas de la misma edad de mis alumnos,
pero, como los nombraba otra película de hace algunas décadas, jóvenes “no-futuro”
(Gaviria 1990). Siel Estado cumpliera su cometido, piensan mis alumnos, los mejores
estarían protegidos de la violencia y los peores estarían encarcelados, como en las series
y películas norteamericanas. Se imaginan así el triunfo liberal del Estado-Leviatán, de
su monopolio de la violencia, y en últimas, el triunfo de la civilización sobre la barbarie.
Se lo imaginan con facilidad pues son una generación queha crecido a la sombra de las
doctrinas de seguridad ciudadana sin cuestionarla, pero no tienen claro cómo se llevaría
a cabo esta transformación en la práctica, ni su relación con esos policías tan
amenazantes y temidos como una fuerza militar de ocupación.
La segunda respuesta que suelen dar mis alumnos surge de la simpatía que el
documental logra despertar, a pesar o quizá precisamente...