Educación inclusiva
Páginas: 6 (1494 palabras)
Publicado: 11 de febrero de 2014
La educación inclusiva: entre la crisis y la indignación
He comprobado con tristeza como los ponentes a lo largo de todas estas jornadas han dibujado un panorama un tanto desolador y que viene a confirmar la sensación que impera en el ambiente y es que nuestros políticos parecen más preocupados en cual va a ser el nuevo recorte en servicios sociales, educación, sanidad, etc (servicios básicospara cualquier sociedad desarrollada que presume de serlo o presumía de serlo como la sociedad española) antes que encarar los problemas de otro modo y pedirle a los que más tienen que sean los que más aporten para hacer frente al contexto de crisis económica mundial que nos afecta y que está teniendo una especial incidencia en nuestro país.
Recortes en los servicios sanitarios, serviciossociales, ley de dependencia, educación, etc provocan que los colectivos más débiles y los más desfavorecidos sean, paradójicamente, los más perjudicados por la crisis y carezcan de los recursos necesarios para llevar una vida digna. Creo firmemente que los principios de la Constitución de 1978, de los que tan a menudo alardean nuestros políticos, han desaparecido y el derecho a cosas tan esencialescomo una vivienda digna, educación y sanidad de calidad, un empleo….se están convirtiendo en auténticos lujos para la mayor parte de la población.
En el caso de la ponencia que estamos analizando, el aspecto referido a la educación inclusiva es especialmente preocupante.
Coincido con el ponente cuando analiza muchos de los erróneos planteamientos que han podido o pueden calar en algunaspersonas acerca de la discapacidad. Considero que la sociedad puede ser, en muchos casos, la “promotora” de estas situaciones discapacitantes y que, por lo tanto, como sociedad tenemos una obligación a la hora de paliar estas situaciones. Concretamente la frase en la que dice “una persona no es “discapacitada” tan sólo porque tenga una limitación física o mental, sino también por un entorno el quegenera o incrementa dicha discapacidad”, coincide plenamente con el aspecto que acabo de señalar.
En este sentido, enlazo también con la reflexión de que debemos abordar nuevamente el análisis del concepto de “discapacidad” que muchas veces no es que nos enfrentemos a algún tipo de barrera física o mental, si no que se refiere, más bien, a las derivadas de nuestro entorno.
El autor analizaposteriormente el concepto de la crisis económica y como ha influido de manera innegable sobre la educación inclusiva. Todas las ponencias de estas jornadas han abordado estos aspectos y como la crisis económica mundial nos está afectando mucho más que a otros países de nuestro entorno y como ha provocado recortes en servicios que, hasta el momento consideramos básicos (sanidad, educación, etc) oprestaciones fundamentales (pensiones, ley de dependencia, etc).
Esta situación ha motivado que empresas que destinaban un importante nivel de recursos al capítulo de acción social relacionado con la educación inclusiva hayan visto mermados o incluso desaparecidos sus presupuestos para este aspecto.
El hecho de que en nuestro país existen más de dos millones de niños en situación de pobrezarelativa me saca los colores y debiera sonrojar a nuestros políticos, me parece vergonzoso e indignante cuando hace no demasiado alardeábamos en foros internacionales de nuestra buena situación económica, la fortaleza de nuestro sistema bancario, etc, es decir, todo un espejismo que se ha desvanecido del mismo modo que estalló nuestra burbuja inmobiliaria.
A mi modo de ver la educación no es unsector de mercado, es un servicio esencial, aunque haya quien en estos años de crisis parezca empeñado en mercantilizarla y convertir a la educación en un modo de distanciar clases sociales, de tal modo, que sean los más poderosos los únicos que tengan acceso a la educación. Craso erro, nuevamente a mi entender.
Tendríamos que fomentar, aun en este panorama económico desolador, políticas de...
He comprobado con tristeza como los ponentes a lo largo de todas estas jornadas han dibujado un panorama un tanto desolador y que viene a confirmar la sensación que impera en el ambiente y es que nuestros políticos parecen más preocupados en cual va a ser el nuevo recorte en servicios sociales, educación, sanidad, etc (servicios básicospara cualquier sociedad desarrollada que presume de serlo o presumía de serlo como la sociedad española) antes que encarar los problemas de otro modo y pedirle a los que más tienen que sean los que más aporten para hacer frente al contexto de crisis económica mundial que nos afecta y que está teniendo una especial incidencia en nuestro país.
Recortes en los servicios sanitarios, serviciossociales, ley de dependencia, educación, etc provocan que los colectivos más débiles y los más desfavorecidos sean, paradójicamente, los más perjudicados por la crisis y carezcan de los recursos necesarios para llevar una vida digna. Creo firmemente que los principios de la Constitución de 1978, de los que tan a menudo alardean nuestros políticos, han desaparecido y el derecho a cosas tan esencialescomo una vivienda digna, educación y sanidad de calidad, un empleo….se están convirtiendo en auténticos lujos para la mayor parte de la población.
En el caso de la ponencia que estamos analizando, el aspecto referido a la educación inclusiva es especialmente preocupante.
Coincido con el ponente cuando analiza muchos de los erróneos planteamientos que han podido o pueden calar en algunaspersonas acerca de la discapacidad. Considero que la sociedad puede ser, en muchos casos, la “promotora” de estas situaciones discapacitantes y que, por lo tanto, como sociedad tenemos una obligación a la hora de paliar estas situaciones. Concretamente la frase en la que dice “una persona no es “discapacitada” tan sólo porque tenga una limitación física o mental, sino también por un entorno el quegenera o incrementa dicha discapacidad”, coincide plenamente con el aspecto que acabo de señalar.
En este sentido, enlazo también con la reflexión de que debemos abordar nuevamente el análisis del concepto de “discapacidad” que muchas veces no es que nos enfrentemos a algún tipo de barrera física o mental, si no que se refiere, más bien, a las derivadas de nuestro entorno.
El autor analizaposteriormente el concepto de la crisis económica y como ha influido de manera innegable sobre la educación inclusiva. Todas las ponencias de estas jornadas han abordado estos aspectos y como la crisis económica mundial nos está afectando mucho más que a otros países de nuestro entorno y como ha provocado recortes en servicios que, hasta el momento consideramos básicos (sanidad, educación, etc) oprestaciones fundamentales (pensiones, ley de dependencia, etc).
Esta situación ha motivado que empresas que destinaban un importante nivel de recursos al capítulo de acción social relacionado con la educación inclusiva hayan visto mermados o incluso desaparecidos sus presupuestos para este aspecto.
El hecho de que en nuestro país existen más de dos millones de niños en situación de pobrezarelativa me saca los colores y debiera sonrojar a nuestros políticos, me parece vergonzoso e indignante cuando hace no demasiado alardeábamos en foros internacionales de nuestra buena situación económica, la fortaleza de nuestro sistema bancario, etc, es decir, todo un espejismo que se ha desvanecido del mismo modo que estalló nuestra burbuja inmobiliaria.
A mi modo de ver la educación no es unsector de mercado, es un servicio esencial, aunque haya quien en estos años de crisis parezca empeñado en mercantilizarla y convertir a la educación en un modo de distanciar clases sociales, de tal modo, que sean los más poderosos los únicos que tengan acceso a la educación. Craso erro, nuevamente a mi entender.
Tendríamos que fomentar, aun en este panorama económico desolador, políticas de...
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