Efecto vodka
Se antoja difícil que la reunión logre lareactivación del crédito —queda ahora claro que éste no regresará a los niveles anteriores a la crisis en un periodo medido en años y no meses, o que consiga la coordinación de políticas fiscales para impulsarla demanda agregada global más de lo que ya se ha hecho.
El impacto más relevante del proceso de G-20 será el de largo plazo. Los gobiernos tienen no sólo la responsabilidad de establecer un nuevomarco reglamentario que haga más difícil caer en crisis como ésta, sino en preservar la globalización e integración económicas.
La definición de una arquitectura financiera internacional serácontrovertida y mostrará una vez más la división ideológica tradicional entre muchos de los países europeos que abogan por una reglamentación internacional y Estados Unidos que privilegia la supremacía ysoberanía de sus mecanismos internos. Mientras que Estados Unidos es siempre renuente a ceder soberanía —en todos los temas: seguridad, finanzas, corte internacional de justicia— los países europeos estánya acostumbrados a una cesión natural como consecuencia de su participación en la Unión Europea.
Por esta razón, el énfasis del presidente Obama en Londres estará centrado en los paquetes deestímulo —que incomodan a los europeos ya que sus programas de asistencia social sirven como estímulo y gasto deficitario automáticos— y no en el diseño de reglamentación financiera internacional.
Para loseuropeos el incentivo es el inverso: argumentar a favor de una mayor regulación y supervisión internacionales a las instituciones financieras. Esta discusión no quedará saldada y continuará un...
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