El derecho penal es la última razón de la sociedad, no debe utilizarse siempre.

Derecho Penal Electoral, la Última Razón
Lic. Patricia Eugenia Ortega Cubas

En estos momentos en que la entrega-recepción de la administración pública se presenta, se hace imperativo el realizar un recuento de la labor realizada. El valorar lo logrado y reconocer lo que falto por hacer. Así nos enfrentamos a una sociedad que actualmente considera a la FEPADE como una Instituciónde prevención y procuración de justicia; pero que antes que nada sabe que es la FEPADE; diferencia radical con la institución que nació hace 12 años. Y aquí surge una primera y trascendente interrogante que afectan al ciudadano común: ¿Qué es un delito electoral?
Quisiera con la experiencia que el encargo me ha dado, como Directora General de Control de Procesos y Amparo en Materia deDelitos Electorales y diecisiete años en materia penal; poder dirigirme a la ciudadanía, para explicarle que es lo que nosotros como abogados consideramos un delito electoral y que es eso que en lo particular, ha ocupado mi espacio laboral e intelectual, que es “El delito Electoral”; figura que he perseguido en los tres últimos años. Debo primero tratar de romper el paradigma de que dependiendo decuantas personas tenga la FEPADE en la cárcel será efectivo su actuar. Pues realmente ¿en ésto recae el éxito de nuestra función?
Nuestra idea del delito electoral no debe perder de vista que conforme al Código Penal Federal, en su artículo 7º “delito es el acto u omisión que sancionan las leyes penales”. Surge aquí nuestro primer límite, solo podrá castigarse y considerarse delictivo,lo que nuestro legislador ha señalado expresamente. Así solo se hablara de un delito, cuando todos y cada uno de los elementos que la norma señale se acrediten. Por tanto, si uno de los elementos no se cumple, aún y cuando se parezca, la conducta nos podrá parecer quizás inaceptable socialmente, pero su nivel no será penal; es lo que yo denomino la teoría del sastre o el traje es a la medida,terminado, completo o no se le puede poner; por tanto si los hechos se parecen al traje, pero no tienen todas las costuras o le falta solapa; no existe delito. Nuestra legislación actual solo contempla 10 artículos (el 401 señala quienes son Servidores Públicos, el 402 las penas de inhabilitación y destitución y el 413 solo refiere forma de participación), para contener a los delitos electorales. Hoypor hoy consideramos que el día de la jornada electoral se puede hacer proselitismo político sin que sea un delito; pues es solo delito si el proselitismo se hace en la casilla o en el lugar donde se encuentren formados los votantes; pues la ley solo señala esta referencia espacial (casilla o fila) para la comisión del delito; de donde, a contrario sensu; si se hace proselitismo en el super, a 5calles de la casilla no hay delito; sin embargo, el recoger las credenciales o una credencial para votar en cualquier tiempo; sin importar si se impidió o no el voto, es siempre delito. Solo por mencionar ejemplos en donde nuestra actuación no resulta lógica para el ciudadano común y nosotros cumplimos exactamente con la ley, aplicando lo que el legislador estableció.
Nuestra labor comorepresentantes sociales (función que como Procuraduría ejercemos) es “únicamente” el aplicar la ley. No se puede cuestionar la norma, cuando se ejerce el encargo, menos aún actuar arbitrariamente o juzgar de forma subjetiva, si es que realmente somos concientes de la función que se protesto; debemos respetar la ley y sustentar nuestro actuar en los límites y márgenes que la norma señala. En materiapenal no existe analogía ni mayoría de razón[1] y estos principios son la fuente de nuestra seguridad como ciudadanos, de que ninguna autoridad actuara en nuestra contra, solo porque le pareció que lo que hacíamos no era adecuado y “pudiera” ser un delito. Con estos principios estamos seguros de que nadie nos culpara de algo que “pudiera parecerse a un delito o debiera ser delictivo”. No toca...