el hombre que queria recordar

Los guaraníes conforman una vasta familia extendida en países como Paraguay, Brasil, Bolivia y Argentina. Su lugar es la selva, un lugar donde hasta la llegada de los españoles pudieron desarrollar su cultura, en sus orígenes un pueblo guerrero, dueños de un complejo y rico universo espiritual y religioso.
La búsqueda incesante de la Tierra Sin Mal, un territorio idílico que el guaraní aspira aencontrar en este mundo o en el otro, es quizás el rasgo más saliente de su cultura.
La religión guaraní que todavía perdura en algunas personas, se basa en mitos, muchos de los cuales son transmitidos en forma de cantos sagrados.
Cuentan la historia de la creación de la tierra, el origen de los animales, de las plantas, de los hombres, la organización y los dioses.
Los guaraníes creen en unparaíso y en una Tierra sin Mal, un lugar donde no existe la enfermedad, el sufrimiento y la muerte.
Tienen gran cantidad de bailes y cantos religiosos para dirigirse a los dioses y rezos individuales para poder encontrar la perfección del alma. La religiosidad se expresaba a través de la palabra hablada y cantada.
La palabra es el alma, la muerte es la perdida de la palabra y la bellas palabras“ñe’pora” son el equivalente de la sabiduría y santidad. El vocablo ñe’e designa la voz, la palabra alma.
La virtud más alta del guaraní es su capacidad de creación poética, de concebir y poder expresar el “ña’epora”, la palabra hermosa.
La religión se basa en identificar el concepto del alma con el de la palabra, mediante el canto ritual y la danza, los guaraníes lograban la purificaciónnecesaria para lograr la vida plena.
Para el guaraní, la palabra es canto, danza y oración para poder comunicarse con los dioses.
El ser guaraní se identifica con la palabra y marca el rasgo esencial del hombre desde el mismo momento que es engendrado, el ser humano es una encarnación de las palabras, el padre le comunica a la madre la palabra sagrada en el acto amoroso.
Es el chamán guaraní esquien sentado en su “apuka” de cedro y en la profundidad de su sueño concibe la palabra, que es instrumento de perfección y es a través de ella que los guaraníes se hacen más sabios y más hombres.
Los chamanes son llamados también “oporaiva” (cantores), el mayor talento de los chamanes es la capacidad de entonar el gran canto ritual, “el mboraheipuku” o canto largo, que en ocasiones puede durarmuchas horas, incluso toda la noche.
Para el pueblo guaraní, la danza es una forma de oración, de poder conversar con la divinidad. Se realiza en la morada del Ñanderú, llamada Casa Grande y es para los guaraníes un templo sagrado.
Todos los días, cuando comienza a oscurecer, el Ñanderú se para ante el altar, frente al saliente, con la diadema y demás atributos de su investidura y comienza a sacudirsu “mbaraka”, que es una sonaja pintada con varios motivos de colores, realizada en una calabaza o porongo seco que se agujerea arriba y abajo para atravesarle un mango de madera que sobresale unos centímetros, y en su interior contiene semillas, piedras pequeñas y dientes de animales.
El mbaraka es de uso exclusivo de los chamanes, lo utilizan para marcar el ritmo de la danza mediantemovimientos suaves y circulares. En seguida es rodeado por los señores de la vara o “yvyraijo”, que son los auxiliares de la ceremonia y los encargados de encender velas de cera de abejas y alimentar el fuego para poder iluminar el lugar donde danzan.
Mediante una señal, los hombres que esperaban afuera, ingresan con los pies descalzos y con el pecho cruzado por una banda y se paran frente al altar, alcostado de los ayudantes.
Las mujeres ingresan y se ubican al fondo, con su “takuapu”, llamado también “takua kama”, que es un bastón rítmico de uso exclusivo de ellas. Se realiza con una caña tacuara gruesa de unos 90 centímetros de largo, y en su interior está cargada con los mismos objetos que el mbaraka del chamán, el sonido se obtiene dando golpes en el suelo.
De cara al sol, el Ñanderú...