El movimiento de independencia y la revolución mexicana: una perspectiva desde la filosofía de la historia

EL MOVIMIENTO DE INDEPENDENCIA Y LA REVOLUCIÓN MEXICANA: UNA PERSPECTIVA DESDE LA FILOSOFÍA DE LA HISTORIA
Mtro. José Refugio Magallanes

La perspectiva propuesta para este trabajo considera un análisis del hecho histórico desde la plataforma del argumento filosófico, sin debilitamiento del argumento histórico, propiamente dicho. Se entiende aquí por argumento filosófico el que admitealternar con el hecho histórico axiomas o supuestos, principios y reglas, causas próximas y remotas, y contrastes entre verdades y falacias. Se apela pues a la razón en las normas lógicas de deducción e inducción para interpretar, corregir o aceptar el hecho histórico que adquiere trascendencia por su condición paradójica, pues es al mismo tiempo estático y dinámico, monogénico y poligénico, plasmadopor signos y de transmisión verbal, pero sobre todo trascendente porque admite su análisis más allá del espacio físico y temporal en que tuvo lugar.
Antes de realizar un análisis de los acontecimientos bélicos de la Independencia y la Revolución habrá que definir al México DEPENDIENTE –léase Nueva España- y al pre REVOLUCIONARIO –léase Paz Porfiriana.

La Nueva España

En el primercaso, se debe identificar más que una nación un reino o virreinato que supone 300 años de conformación[1] y un nombre distinto al que hoy día conocemos como nuestra Patria.
El sentido histórico-filosófico del mismo nombre del reino americano opera no como un snobismo superfluo que pueda significar “algo reciente” o “algo nuevo” como posesión, mas por el contrario su significado tiene ciertaprofundidad: La Nueva España es una conclusión de silogismo categórico que se sustenta en premisas antecedentes.
Dichas premisas se infieren de las leyes y prohibiciones reales. No se permitía la migración de moros ni de judíos; no se permitían ni obras ni personas protestantes. En oposición, se procuraba el envío de CRISTIANOS VIEJOS y de frailes de virtud comprobada; los primeros paraocupar los puestos de dirección político-militar y los segundos para la titánica labor evangelizadora. Por estas premisas se puede sacar en conclusión que lo que se armaba era una nación nueva, sin elementos “peligrosos” para una cristianización que rayaba en la utopía: la cristiandad europea se liaba en guerras contra las herejías desde hacía ya varios siglos, luego, América debía mantenerse sincontagio anticristiano. Un modelo nuevo de cristiandad, una NUEVA ESPAÑA.
Ciertamente, La Nueva España se edificó sobre las ruinas de ciudades indígenas. Literalmente se edificaron catedrales cristianas donde antes había adoratorios a Huitzilopochtli, a Tlaloc, a Xipé y muchos más. La religión, la filosofía y el derecho de los cristianos también se sobrepusieron a los existentes creando unnuevo ambiente sistémico sustentado en la simbiosis, esto es, tomando partes de allá y de acá.
La religión cristiana practicada evangélicamente por los frailes se fusionó con el profundo espíritu religioso del indígena. Muy pronto, en 1531, un signo apareció ante los ojos del indígena y del español que unificó sus cosmovisiones. En el ayate guadalupano, los indígenas pasaron lectura a modo decódice… el mensaje fue contundente: el quinto sol se ha manifestado y no es de destrucción sino de salvación. El español por su parte leyó en exegesis las sagradas escrituras sobre la mujer del Génesis y del Apocalipsis.
La filosofía platónico-agustiniana y la aristotélico-tomista propusieron un orden lógico en el binomio de la teoría y la praxis. Al ir sembrando religión se sembrabatambién filosofía, y de ésta “una moral de las que se deducen los usos y costumbres y de éstos a su vez se determinan la legislación y el gobierno”, según afirma Gibaja y Patrón.[2]
En resumen, el antecedente próximo de lo que hoy aceptamos como La República Mexicana es un territorio de más de 5 millones de kilómetros cuadrados –y creciendo hacia el norte-, una nación con pobladores regidos...