El Saber Y Concepciones De Direccion, Conduccion A Nivel Organizacional

UNIVERSIDAD NACIONAL DE CORDOBA

FACULTAD DE PSICOLOGIA


















“EL SABER Y CONCEPCIONES DE DIRECCION, CONDUCCION A NIVEL ORGANIZACIONAL”


















Cuando hoy tratamos de situar al individuo en su lugar de trabajo, nos encontramos con limitaciones que enmarcan la subjetividad y la amoldan de acuerdo a los presupuestos sustentados en talámbito laboral. Entonces cuando instantáneamente se pone en juego el SABER HACER que refiere a las habilidades, destrezas y la aplicación de los conocimientos de las personas frente a diversos problemas concretos; el saber externo aparece y remarca su camino establecido.
En correspondencia con lo anterior Dejours (1999) lo sintetiza como un “equilibrio inestable” ya que nunca puede realizarse unaoperación sin el cuerpo que la produzca y sin generar subjetividad, aunque esta última se evidencie sacrificada en aras de la objetividad formulada por el proceso de trabajo formalizado. Estos últimos procesos están determinados por lo que el autor Mitzberg (2000) denomina como cumbre estratégica que no es otra cosa que la cúpula de mando responsable de la supervisión de la totalidad del sistemay sucesivamente la línea media que se trata de la cadena de transmisión entre la cumbre estratégica y el núcleo operativo. Por ende las personas que realizan el trabajo encargadas del aprovisionamiento, producción y distribución de productos, servicios responden a un “saber instrumental” que se estructura alrededor de estrategias y objetivos desligados netamente del bando gerencial y cuspidal.En otras palabras son “modos” de direccionar que se ensamblan en el campo del trabajo contemporáneo y con el surgimiento de la tecnología digital que acentúa el fenómeno de formalización e instaura un tipo de coordinación supervisado, automático y externalizado pero que indudablemente involucra desenlaces personales impregnados además por un conjunto de premisas sociales construidas llevadas acabo en las practicas que posiciona al individuo en una trama colectiva dentro del espacio laboral. En la misma línea de pensamiento, el autor San Emeterio (2010) insiste en la progresiva desincrustacion del saber productivo del trabajo del cuerpo que opera dicho saber y a partir de esta característica se obtendrían los resultados, configurándose como objeto, autorreferente en alguna medida yposicionando al sujeto como soporte de dicha operación autorreferente del saber. Adquiere la denominación de autoaplicable, prescindiendo de la técnica del cuerpo y operando por si mismo. Sin embargo, la presencia de esta relación compleja de exterioridad con el saber que operan no obstaculiza la reconstrucción del saber que permite construir al sujeto cognitivo consciente.
Los anteriores postuladoscongenian particularmente con el paradigma que Thevenet (1984) denomina “paradigma-maquina” que se asimila a la organización con una maquina casi perfecta, totalmente modelizable hasta el punto de alcanzar el punto optimo de formalización que asegure la eficacia máxima en el comportamiento de los grupos operativos. Así, los espacios organizacionales se ven totalmente reducidos a parcelasatomizadas, desgranadas e inconexas que no presentan una continuidad temporal y espacial, sino de característica fragmentada que remite a un tiempo acotado y delimitado por tales operaciones productivas. Aunque se evidencia una cierta discontinuidad en tales procesos, si insistimos en un sujeto que inevitablemente la subjetividad flota y readapta su presencia, no estamos especificando un cuerpo quetrabaja únicamente, sino que se encuentra envuelto e incrustado en una dinámica subjetiva que involucra lo psicológico y lo social en el ámbito laboral.
En consonancia con lo anterior planteado, cuando caracterizamos a la mayoría de las organizaciones del hoy, se enfatiza en una rigurosa planificación con objetivos destinados a la productividad, crecimiento y posicionamiento en el mercado, a las...