El sueño de Brunito

El sueño de Brunito

La cantidad de cosas que se le están vieniendo a la cabeza al pibe. No lo puede creer, se le está por dar. La cancha es un hervidero, Racing empata 1-1 con Estudiantes yfaltarán unos 20-15 minutos para que termine. Ahí está él, recibiendo las últimas indicaciones antes de saltar al verde césped. “Si tenés una, pegale pibe, vos pegale al arco. Y buscalo al Chipi por la raya,que el 4 está muerto”, le pedía el DT.
¿Qué dia especial no? Brunito al fin puede pensar que, después de tanto pelearla, se le va a dar ¡Porque la peleo, eh! De procedencia humilde, se la pasaba eldia entero pateando una pelota en su Churquillo natal –pequeño pueblo de Santiago del Estero-. Era bueno el pendejo ¿pero quién hubiera dicho que iba a llegar hasta acá? La cuestión es que a los doceaños un hombre que decía ser representante le ofreció llevarlo a Buenos Aires para jugar en Racing. Él, chocho, no lo podía creer; los viejos la dudaron un poco, pero confiaron en que era lo mejorpara Brunito. Y ahí sí que la peleó: tuvo que inflar pecho y dejar a su familia y amigos para sumergirse en un mundo nuevo para él (acordate que el pibe nunca había salido de su pueblo, lo llevaron acapital y no entendía nada). Vivía en la pensión del club, no le faltaba nada, bueno, salvo el viejo y la vieja. Mierda que los extrañaba, eh, si un par de veces se rayó y quiso dejar todo y volversepara el pueblo, pero por suerte lo pararon¿ Cómo lo van a dejar irse? –Pibe, vos tenés pasta, si le seguís dando vas a llegar lejos– le decía el profe de la 6ª. Y él le siguió dando duro en inferiores,ganándose un lugar y despertando interés por parte de la gente que se daba una vuelta por el predio y se encontraba con las inferiores entrenando. ‘¿Cómo se llama el 8? Pinta bien el pendejo che’ ¡Sise mataba en los entrenamientos el guacho! Nunca con desgano ni con mala cara, ni tampoco caía sin dormir por salir de joda la noche anterior como muchos de sus compañeros. Siempre con el objetivo...