¿Escribir Para Enseñar O Enseñar Para Escribir?

Compartir experiencias es un hecho común entre colegas ya que a partir de la socialización de las prácticas realizadas y los acontecimientos durante estas, podemos servir de ayuda o guía para algúncolega, enriquecer nuestras labores o tal vez solucionar inconvenientes al someterlos a una mirada desde un punto de vista ajeno. En el campo docente, la socialización de experiencias tiene un granvalor, no solo por la infinidad de situaciones que surgen en el aula de clase sino también por las diferentes estrategias de las que un docente se puede valer para enseñar, logrando así que la pedagogíase convierta en un campo de conocimiento compuesto, con los elementos teórico y práctico.

Tanto el componente de la teoría como el de la práctica poseen un gran valor y ninguno de ellos esdescartable, los avances teóricos propuestos por los investigadores pedagógicos seguro que tienen sus argumentos y sus bases en otros campos como la sicología o la antropología y pueden llegar a ser muyacertados como también puede que en el momento de llevarlos a la práctica demuestren ser inútiles. Es aquí, donde el saber experiencial cobra un gran valor ya que en el momento de ser divulgado ya ha sidosometido a prueba y a una revisión concienzuda por parte del docente.

Para que estos saberes puedan ser socializados de la manera correcta, es decir, que la experiencia sea revisada y se realiceuna reflexión en torno a ella, se debe utilizar un medio de comunicación que permita una revisión constante, el medio que seguramente garantizará este proceso es la escritura. Por esta razón LuisEduardo Peña Borrero en su texto La escritura como una forma de reivindicar el saber de los maestros, une las voces de varios docentes en un escrito que tiene como objetivo incentivar a los maestros aescribir sobre sus experiencias, haciendo énfasis en que estos escritos no deben ser expuestos simplemente como anécdotas sino que deben ser analizados, examinados y editados con ojo crítico, para poder...