Fluxus

Prólogo.-
Entre los componentes del grupo hemos recapacitado sobre lo que ha provocado en cada uno de nosotros esta asignatura, o más concretamente, el arte de acción. Descubrir el arte de acción ha sido, para nuestras mentes racionales, algo impactante al principio, pero una vez hemos percibido la diversidad de las tendencias, y las hemos contextualizado en su entorno histórico y artístico,hemos ido descubriendo parte de su sentido ya que, en cierta medida no eran sino respuestas a actitudes de la sociedad bastante deterministas sobre lo que era arte y no lo era, y sobre cómo debían de ser tratadas las obras de arte.
De todo este arte de acción, elegimos la tendencia Fluxus para este trabajo ya que, mediante su artista más emblemático, Joseph Beuys, y a través de sus dos obras másconocidas, "El Coyote" en 1.974 y "Cómo explicar los cuadros a una liebre muerta" en 1.965, provocaron que nuestros esquemas mentales sobre qué entendíamos como arte fueran destruidos, y desde sus ruinas, surgiera un nuevo entendimiento o más bien, una nueva percepción del arte desde una perspectiva más abierta e interesante.

Contexto Histórico.-
En el desarrollo de el presente trabajo hemospodido comprobar cómo efectivamente tendencias como Fluxus son difícilmente entendibles sin el ejercicio de contextualizarlas social e históricamente en sus años de desarrollo. El ataque contra el arte de talento provenía de una interpretación muy diferente de lo que habían significado las actividades y las ambiciones de los artistas de las vanguardias históricas y se orientaba en una dirección quepolitizaba no tanto la forma artística misma como su modo de producción y distribución, de cara a una transformación del significado social e individual del arte.
El arte del siglo XX se desarrollaba en un mercado internacional del arte, gestado en el siglo XIX cuando se rompe la relación entre el artista y el cliente (se rompe el mecenazgo), y el artista ya no estará condicionado por la opinióndel cliente, sino por la del público. Aparece la figura del crítico que indica a ese público que artista es bueno o malo, a su vez aparecen publicaciones relacionadas con la actividad critica como las columnas de opinión. Todo esto llevará al nacimiento de un marketing del arte.
A partir de la segunda Guerra Mundial nacieron mecanismos de inversión en obras de arte surgiendo empresas queinvertían en arte (denominándolos bienes tangibles) aprovechando las ventajas fiscales que aportaban. Esto dinamizó el arte como mercadería apareciendo las ferias, citas anuales de carácter internacional que suponían una eficaz difusión para los artistas.
Especial importancia asumen las galerías de arte que se profesionalizan con las primeras vanguardias. En la primera década del siglo pasado, laspropuestas de la primera vanguardia se apoyan en contratos en exclusiva con marchantes. A partir de estos marchantes históricos gran parte de los movimientos del siglo XX van a estar vinculados y obligados a ciertos marchantes. Los galeristas o marchantes comienzan a realizar contratos en exclusiva con los artistas a cambio de organizarles exposiciones y vender sus obras.
A partir de la década de lossesenta las artes plásticas dan un giro importante abandonando el concepto de arte como mercadería (algo ya iniciado con el Dadaismo), si en el arte tradicional predominaba el objeto sobre el concepto, desde la abstracción, se da un equilibrio hasta pasar a situaciones límite donde el concepto es más importante que el objeto. Tan necesario como percibir la obra concreta es actualizar los conceptosteóricos anteriores a la misma, sus presupuestos productivos y receptivos.

Nacimiento de Fluxus.-
El punto de partida de esta tendencia son los cursos impartidos por John Cage en los verano del 1956-1959 en la escuela de arte de Nueva York, algunos de esos discípulos fueron George Brecht y Allam Kaprow.
En 1958 Allan Kaprow viajó a Darmstadt para asistir a la Feria Internacional de Nuevos...