Historia

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Qué hacer ante el abandono de un empleado enojado

En mi breve transcurso laboral he compartido momentos con personas encantadoras que se acercan a mi oficina y decidendesvincularse de la compañía en la que trabajamos, por una serie de razones. Todos hemos contado con esa persona de buenos talentos que se nos escapa.
Probablemente, a algunas personas no les guste el caminode vida en el que están (es decir, del altar), algunos no les agrada su jefe (su pareja), algunos odian la función que desempeñan (los platos); por lo que se van. Con suerte nos dejan en buenostérminos, y hay que considerarse afortunado si nos dejan su información de contacto.

He tenido mi propia gente que se me escapó. Un financista que fue mi compañero de trabajo, al cual siempre he tenidocomo referente ante dudas de la materia. Luego, un amigo que odiaba a su jefe pero, tanto como a mí, nos encantaba nuestra empresa y nuestros clientes. Pero, al pensar en la persona que tenía queinformar todos los días, eligió otra compañía.

Por otro lado, tenemos aquellas personas enojadas que nos dejan en malos términos. Quizás nos dejen por el hecho de que estaban a punto de ser despedidospor un tema de incumplimiento, y deciden renunciar antes. Es probable que nos guarden serios rencores y no solo a usted, sino también a su empresa.

¿Qué deberíamos hacer al respecto y cómo locontrolamos? La mejor respuesta sería preguntarnos qué no hacemos. Aquí les presento algunos aspectos que valdría la pena tener en cuenta para manejar estas difíciles situaciones.

- Sus antiguosempleados, resentidos con usted, probablemente sean amigos de sus empleados actuales; y es así como debería ser. Quizá hayan pasado mucho tiempo juntos y, después de todo, fue su negocio lo que losunió. Incluso algunos hasta podrían ser amigos de por vida! Sin embargo, las personas que todavía trabajan en su empresa entenderán que el resentimiento de sus quienes lo abandonan son solo de ira, y...