Hombres de verdad

Hombres de Verdad, Mariquitas y Defensa Nacional *
Desarrollo
En principio, en este capítulo me proponía responder a la idea de que educar "mariquitas" pondría en peligro la defensa de nuestra sociedad. Puedo imaginar los sombríos avisos de muchos: Estas ideas suenan bien en teoría, pero no funcionarán en el mundo real. Si dejamos de educar a nuestros niños en los valores de lamística de la masculinidad, nos encontraremos con hombres agradables, honestos y sensibles que harán lo que sea por evitar la guerra y la violencia. ¿Pero qué haríamos con los Hitlers, Jomeinis, Karadzic, y el resto del belicoso mundo todavía no liberado? Ellos seguirían educándose como hombres fuertes, duros y dispuestos a combatir a la menor provocación -o sin ninguna provocación-.
Nuestrosmaravillosos líderes "amariconados" se comportarían como cabestros en cuanto la escena política internacional cambiara. No nos podemos permitir este tipo de experimentación; la defensa de la nación, de nuestra sociedad, está en peligro.
Mi deseo en un principio era dar una respuesta tranquilizadora a argumentos de este tipo, pero el objetivo actual del capítulo es muy diferente del inicial. Amedida que investigaba, que entrevistaba a más expertos y que reflexionaba sobre mis descubrimientos, más claramente veía que nuestra sociedad ya está en peligro. Los "hombres de verdad" que dirigen el mundo occidental están incapacitados para tomar decisiones racionales sobre política exterior debido a los valores de la mística de la masculinidad.
Estos valores también sirven paraesconder fácilmente intereses económicos egoístas y ayudan a enmascarar el verdadero motivo de muchas decisiones sobre la defensa, más acordes con intereses económicos del complejo militar industrial (que el je de despedida) que con las necesidades de defensa. Lo que además pone en peligro la seguridad de las naciones.
Este capítulo aborda las formas en que la mística de la masculinidad impide alos hombres de estado ser capaces de hacer frente, de forma racional a los temas de la "defensa nacional".
Posteriormente me ocupo de cómo se influye a muchos ciudadanos para apoyar las guerras sin cuestionarlas, y de cómo se anima a los hombres adolescentes a sacrificar sus vidas en ellas, casi siempre sin necesidad.
Patriotismo, masculinidad y guerra a lo largo de gran parte denuestra historia, el gobernante (o el grupo opositor) que no ha sabido hacer valer los intereses "pragmáticos" sobre los morales o que no ha adoptado una política monolítica de beligerancia y/o de guerra a gran escala contra "el enemigo" de turno ha sido considerado indeciso, débil, cobarde, poco hombre, traidor a la patria, tonto, inútil y más recientemente "mariquita".
En 1848, el entoncescongresista norteamericano Abraham Lincoln fue criticado en la prensa de Illinois por su posición contraria a la guerra contra México, una guerra emprendida por Estados Unidos con el fin de conquistar a México algunas de sus provincias. The Register, un periódico del distrito al que representaba Lincoln, deploraba "la horrorosa humillación" a la que "traidores morales" como Lincoln habían llevado elnombre el honor de la nación.
En 1987, entrevistando al columnista del New York Times Tom Wicker, recordaba cómo durante la guerra de Vietnam muchos le veían como un traidor a la patria porque se oponía a la guerra, mientras que no se veía así al columnista Joseph Alsop, que apoyaba la guerra. Wicker explica: "Si estabas a favor de la guerra no eras un traidor... el general LeMay decía quehabía que bombardear al pueblo vietnamita hasta devolverlo a la Edad de Piedra... sólo por esto era un héroe nacional; mientras que a quien en esta época se manifestaba a favor de la paz se le veía como una especie de mariquita…".
Estar profundamente comprometido con la negociación, oponerse a una guerra o a una acción militar concreta, no sólo se considera poco patriota, también...