IDEAS PARA TRABAJAR CONFLICTOS. PSICOMOTRICIDAD PREVENTIVA Y TERAPÉUTICA.

psicomotricidad preventiva y terapéutica

Ideas para trabajar los conflictos

1.

Etapas de madurez emocional.

Consideremos que son cuatro las emociones básicas, para poder nombrarlas y entendernos. Alegría,
tristeza, miedo y agresividad. La agresividad, como cualquier emoción base, tiene tres etapas de
madurez. Éstas dependen cada una de la anterior y seguimos transitando porellas continuamente,
también los adultos:
1ª Ser consciente, saber qué me pasa.
Tiene un nombre, nos pasa a todos. Enfadarse es legítimo. “Estás enfadado”. El lenguaje descriptivo y la
frase enunciativa son lo más útil. “¡Qué cara de enfadado tienes!” “¡Vaya, tu enfado es grande!” Sin
censura, sin juicio. Enfadarse es algo útil, necesario. Pobre del que no sepa enfadarse, pobre del que no
sepatener miedo. Todas las emociones son necesarias. No saber qué te pasa es realmente perturbador.
Así que, a veces, la intervención para favorecer la maduración en la gestión de las emociones, es
sencillamente esta, reconocerla. Reconocer es algo que se puede hacer con una sola mirada (de acoger y
aceptar lo que le pasa) o verbalizar la situación de forma descriptiva, con empatía. Si el sujeto nisiquiera
sabe qué le pasa, no puede tomar esa mínima distancia emocional, está demasiado invadido por su
emoción, no podrá ni pedir perdón por haber agredido a otro, ni calmarse, ni pedir ayuda o aceptarla
cuando se la ofrezcan, ni resolver el motivo de su enfado. Así que en este primer piso del edificio
RECONOCIMIENTO.
2º Poder ir al otro en busca de lo que necesito.
Entra en juego elobjetivo de la comunicación. Por ejemplo, ir a buscar descarga, ayuda o consuelo. Para
que esta segunda etapa se desarrolle, la de ir hacia los otros a buscar la satisfacción de lo que necesita,
es necesario que la otra esté cubierta. Es necesario saber qué te pasa, para poder pedir ayuda o al

1

ana samitier

psicomotricidad preventiva y terapéutica

menos saber qué necesitas o empezara averiguarlo. Si el niño ya es consciente de que está enfadado,
tiene esa capacidad de tomar distancia con lo que le pasa, podrá recibir preguntas como “¿qué
necesitas?” o intervenciones que enmarquen su necesidad de descarga o de ser acogido en un juego,
como los que se describen más abajo. Solemos encontrara a los niños de entre 3 y 12 años en esta
etapa, así que la intervención ideal es la deespacializar y temporalizar un juego que dé respuesta a sus
necesidades, alguna dinámica con claro principio y claro final qye el maestro gestiona y dinamiza.
3º Poder admitir que puede que el otro no esté para mí en este momento
(La maestra está atendiendo algo más importante) Esto supone un grado de madurez, en la gestión de
las emociones, que ponen al niño (o al adulto) en una situación depoder convivir perfectamente, pues
no se va a dar ningún exceso pulsional, la persona es capaz de distanciarse, de simbolizar y de saber
perfectamente qué le pasa y qué necesita respecto a ello. Muy a menudo les pedimos a los niños que
tengan este grado de madurez. Si nos paramos a pensar en nuestro entorno, hay muchos adultos que no
soportan tener que esperar cuando se sienten desbordadospor una emoción. O muchas ocasiones en
que nos pasa a nosotros mismos no saber qué nos pasa exactamente y necesitamos charlar con un
amigo para poder aclararnos y ver con claridad. Porque el amigo nos facilita esa distancia. Por todo esto
la simbolización, la representación, es tan importante en el trabajo con emociones. Primero la vivencia
con acción y después el símbolo con palabra o conplástica.
Se puede permitir jugar la agresividad. Aparecerá de todas formas, le demos cancha o no. Y si el aula no
es un lugar para jugarla, será actuada por libre, de forma no contenida y, por tanto, más peligrosa.
Como profesionales, cabe preguntarse ¿cómo me llevo yo con la agresividad? Saberlo nos hará ser más
ajustados a la hora de intervenir. Separar lo que a mí me pasa de lo que le pasa al...