La autoridad

La Autoridad
El acto educativo implica un acto de autoridad. Debe ser construido a partir del propio ejercicio de nuestras actividades, manejando técnicas pedagógicas adecuadas a las edades y contextos en los cuales viven nuestros estudiantes.

La autoridad docente en cuestión: líneas para el debate.
La critica anti-autoritaria de los años 60 y 70, con movimientos radicalizados en lapolítica, la cultura y la sociedad, inauguro una época donde la autoridad debe demostrarse cotidianamente para seguir siendo legitima. Un primer análisis indica que la amplitud de este cuestionamiento tiene que ver con el afianzamiento de las instituciones democráticas, con la escolarización de masas y con la ampliación del acceso a los bienes materiales. Un segundo análisis trae, los cambios culturalesy tecnológicos que tuvieron lugar en el ultimo siglo, acelerados exponencialmente en las ultimas décadas.
Los niños y jóvenes se comportan como sujetos con igual capacidad de decidir de consumir y de ser objeto de discutir, son mediáticos que los adultos.
El lugar de docentes y adultos en la institución escolar quedo confuso y borroso. Y si bien ya no es posible ni deseable volver ala épocaanterior de posiciones rígidas y jerárquicas incuestionables, vale la pena preguntarse si estamos condenados a vivir en la confusión, o si podemos convertir a esas paradojas y tensiones en algo mas productivo pedagógicamente y, por que no, placentero.
La enseñanza también supone construcción de formas de autoridad: el currículo constituye una autoridad cultural, el Estado y las institucionesdonde desarrollamos nuestro trabajo establecen formas de autoridad. El conocimiento científico se constituye en una autoridad.
Al mismo tiempo, todo proyecto educativo implica también una visión sobre quien y como ejerce autoridad.
La educación, entonces implica siempre un ejercicio de poder; es un acto de autoridad que conlleva a una responsabilidad: la de asumir tareas, transmitir, enseñar algoa otros. Introducirlos en otros lenguajes y códigos, y darles herramientas para moverse en el mundo.

Las palabras y cuestionamientos de chicas y chicos tienen, muchas veces, un fondo de verdad sobre lo que sucede en el aula. Aún cuando requieran de los adultos lecturas no literales de esos reclamos, y búsquedas pedagógicas que identifiquen cuales son las fuentes de malestar y proponganestrategias para superarlas.

El primer trabajo que tenemos por delante es el de encontrar nuevas formas de autorización de las palabra docente, desde el lugar de aquello que los docentes poseen y tienen la responsabilidad de brindar. Habría que buscar autorizarnos como interpretes y puentes que dibujen otros cruces entre las generaciones y entre los saberes.

Conflictividad y autoridad en laescuela
Las imágenes de la escuela como lugar violento se han multiplicado recientemente en los medios y en la opinión publica, y aun cuando no sea fácil de establecer que tanto de esa conflictividad pueda o deba llamarse violencia.
La autoridad implica una relación de poder, que requiere de algún grado de consentimiento por parte de aquellos sometidos a ella, esto es, de alguna clase delegitimidad, esto quiere decir que la autoridad es una relación, y en tanto tal, una construcción de todos los actores implicados en ella, mas que una imposición unilateral y automáticamente efectiva de una instancia dominante sobre una subordinada.
Es razonable esperar que los conflictos escalen hasta que una de las partes esté en condiciones de imponer condiciones a la otra u otras involucradas.
Enla medida en que los reclamos de autoridad son habitualmente impugnados de manera exitosa, puede reducirse básicamente a tres: la impugnación personal, la impugnación posicionad y la acusación de autoritarismo.
La impugnación personal intenta responder a la pretensión de ejercer la autoridad negando que la persona que la reclama este en condiciones efectivas de hacerlo en virtud de carecer...