La Chingada Según Sor Juana

En el presente ensayo me dispongo a analizar cómo intenta Sor Juana Inés de la Cruz, indagar en el rol de la mujer, de la “Chingada”.

En primera instancia me dispongo a extender el significado que le otorgo y el cual tomo como referencia para mí análisis. El mismo se remite a la connotación que le otorga Octavio Paz[1], donde tras un exhaustivo análisis de la identidad mexicana, hace hincapiéen el sentido de la palabra “chingar”, termino de uso tan frecuente en aquella sociedad. Termina explicando que la idea de chingar, es la de ”hacer violencia sobre otro”, de penetrar con violencia sobre el otro, en un sentido activo y despiadado, sobre un chingado, aquel que es víctima de esta agresión y es objeto de las “chingadas”, por lo que permanece pasivo. En este juego de palabras intentadar cuenta de una relación de dominación entre dos personas, que generalmente esta asociado a la superioridad del hombre, de lo macho, de lo agresivo sobre la mujer, la pasiva, lo delicado en contrapartida.

Por otro lado, considero necesario dar cuenta de por qué decidí referirme así a quién elige Sor Juana defender, a la mujer barroca, con una terminología tan contemporánea y controversial,considerada hasta una ”mala palabra”. Su razón se debe a la primera imagen que relacioné de las mismas, en este sentido de que eran mujeres que estaban encasilladas en una forma de vida determinada, debían casarse, ocuparse de las tareas del hogar, de la crianza de los hijos, era esto lo que esperaba la sociedad de ellas, pero a su vez estaban privadas del acceso al conocimiento, no se les permitía elingreso a universidades o academias que contribuyeran a su formación, era una camino transitado sólo por el género masculino.

Es en esta sociedad donde Sor Juana aparece como un personaje destacable y enigmático, una mujer dotada de inteligencia, que desafió a este destino condicionado por el sólo hecho de ser mujer, de resignarse pasivamente. De esta manera nunca se casó, empleó sus esfuerzos enel estudio, por el cual tuvo que pagar un precio ya que lo logró a cambio de las treguas de lectura en el convento de San Jerónimo donde podía saciar su sed de conocimiento en una celda equipada con una biblioteca y un laboratorio a cambio de prestar sus servicios para la creación de poesías, por lo que podría decirse que se convirtió en “la autora oficial del virreynato”[2]. Por esta razón granparte de su repertorio son obras líricas pero es de destacar que escribió obras de tipo profanas durante este período y en otros momentos de su vida.

El mismo se caracteriza por sus variadas temáticas que van desde lo erótico a la comedia, pero en varios de ellos intentó dar cuenta de esta posición que tenía la mujer, y nunca dejando de lado su incesante ejercicio reflexivo sobre sus obras. Esen este aspecto que Sor Juana, según Octavio Paz, dio los primeros pasos como la primera mujer moderna de México.[3]

Es en este ejercicio que tiene lugar su última escritura donde critica una carta que le fue publicada en 1690 por el obispo de Puebla, que si bien fue escrita por Antonio de Vieyra, la firmó como Sor Filotea de la Cruz, nombre falso que utilizó el obispo. Básicamente la misma seencarga de criticar a Sor Juana su abundante temática mundana en sus obras y el no tratar temáticas más teológicas.

La Respuesta a Sor Filetea de la Cruz, se encarga de defender su condición de mujer y de justificar su innata curiosidad, que la lleva a una compulsiva necesidad por el saber. La misma estaba presente hasta en las tareas de orden doméstico más comunes designadas a las mujeres de laépoca, encerrando a su vez una crítica en esta condición social:

Pues ¿qué os pudiera contar, Señora, de los secretos naturales que he descubierto estando guisando? Veo que un huevo se une y fríe en la manteca o aceite y, por contrario, se despedaza en el almíbar; ver que para que el azúcar se conserve fluida basta echarle una muy mínima parte de agua en que haya estado membrillo u otra...