La falsa vida de Los años falsos

La falsa vida de Los años falsos

Vanessa Tello Hernández


Yo podría hablarte de lo que es estar allá abajo contigo, en tu aparente muerte, y de lo que es estar aquí arriba, contigo, en mi aparente vida.
Josefina Vicens

La identidad es un cúmulo de discursos, ideologías y paradigmas aprendidos y asumidos. Hijos de la tradición, e inmersos en la historia y la cultura hegemónicas, losseres humanos no somos sino meros reproductores – y reproducciones – de la maquinaria social en la que vivimos. Somos así, no más que las piezas necesarias para que los engranajes funcionen lo más puntualmente posible. Pero como simples piezas, somos también seres dispensables: sólo se requiere un individuo lo suficientemente capaz para llenar la “vacante”.
Los años falsos, novela escrita porJosefina Vicens y publicada en 1982, muestra el desgarrador panorama de la disolución de la identidad de su protagonista en su padre muerto para "llenar la vacante" que, tras su deceso, éste último ha dejado.
La novela es un mono-diálogo sostenido entre Luis Alfonso Fernández y su difunto padre, Poncho Fernández, en el 4° aniversario de su muerte. El espacio y el tiempo en que dicho diálogo sedesarrolla son una metáfora de lo que ahí se narra, ya que se da frente a la tumba del padre y comienza con estas palabras: “Todos hemos venido a verme” (227). Desde esta aseveración, la identidad de Luis Alfonso se nos muestra ya diluida en la de Poncho, y continuaremos, a través de su narración, el proceso - doloroso – de esta transformación.
Aquí no se trata entonces de la muerte del padre, sinode la muerte del hijo, quien debe morir para suceder a aquél:

Había cavado un hoyo bastante grande en el centro mismo de la tumba y lo suficientemente amplio como para que tú pudieras salir y yo entrar. Y los dos lo hicimos. (271)

Nuestro protagonista se ve obligado a abandonar sus propios sueños y anhelos para adherirse a los de que él “se espera”. Vive así una vida “falsa”, que en realidadsólo da continuidad a la vida de su padre.
Desde niño, las ambiciones de Luis Alfonso le son siempre ajenas; el gran sueño es lograr la admiración y el respeto del padre (y con él, el de la sociedad). Los hijos se obligan a sí mismos a llenar las expectativas de los padres que sueñan, por cuenta propia y sin preguntar a aquéllos, cuáles deben ser sus destinos. La madre de Luis Alfonso quiere queéste sea médico, y su padre, que sea su viva calca:

Así, durante mi infancia fui variando de aficiones y decidiendo mi destino, siempre a la sombra de tus falsos proyectos, o de tus circunstancias, o de tus elogios, o simplemente de tus exclamaciones fugaces.” (255)

Sólo siendo una copia fiel del padre es que el hijo puede ocupar su lugar en el mundo. Para lograrlo, Luis Alfonso debediluirse en la persona de Poncho Fernández, aun cuando está consciente de que es un ser diferente. Simplemente no puede – o no quiere – luchar contra la transformación que se le demanda: llenar la “vacante” que ha dejado el padre muerto y convertirse en “su padre”:

Pero tú dejaste instrucciones y no me atreví a desobedecerlas. ¿O no quise? De cualquier manera, esto lo hicimos los dos. Somos cómplices.(308)

Luis Alfonso Fernández se dedica entonces a asumir los rasgos, costumbres y modus vivendi de su padre hasta que su personalidad queda segada y se diluye en la identidad de Poncho Fernández.
El primer paso se da en el funeral, al vestir el traje negro de su padre. Al ponérselo, se muestra que la identidad no es sino un traje que uno se pone en vida y hereda a la hora de la muerte:

Noera ponerme tu ropa, era vestirme de ti […] Tu traje negro me obligó a caminar erguido, arrogante, como tú.” (242)

No se trata entonces de un disfraz (que al quitarse deje al descubierto a la persona tras la máscara), sino de una transformación. El traje es así metáfora del lugar del padre en el mundo; traje que se encarna en el hijo y lo devuelve al mundo como “padre”. Con éste vienen...