La Familia en Caritas in Veritate






CARITAS IN VERITATE

Análisis de los puntos de la Encíclica referentes a la Familia







Introducción
Dentro de los temas que se proponen en Caritas in veritate he optado por escoger el referente a la familia. No sólo hago esto por una cuestión meramente personal, sino porque creo firmemente que la familia realiza un papel fundamental en la génesis, formación, desarrollo,despliegue de opciones fundamentales y acompañamiento de la persona durante toda su vida. Si decimos por un lado que la moral social es un problema antropológico (CV, 75), y que la persona es el centro de la vida social, no podemos entonces pasar de puntillas por el tema de la familia, lugar sagrado donde el hombre se construye y se custodia. Suele ocurrir por desgracia que un hogardesestructurado construye un hombre desestructurado, con un déficit en muchos aspectos de su personalidad y su vida. Al contrario, la educación y la acogida de una familia con bases sólidas levantarán una persona “sólida”, en toda la amplitud y plenitud de esta palabra. Podemos unirnos a las palabras de M. Iceta:
La familia, el ámbito comunitario en el que surge la vida, es el útero de la gestación de lapersona. Allí va recibiendo las primeras grabaciones, los primeros mensajes, allí asume una postura existencial1.
Podemos hablar de todas las dimensiones que en la familia el hombre desarrolla: fe, educación, salud… Aquí sólo nos centraremos en las que tienen una repercusión social (pero, ¿alguna no la tiene?).
Podemos decir por tanto, sin temor a equivocarnos, que si queremos construir y crecer enlo moral de nuestra sociedad, la familia debería ser un objetivo prioritario en las políticas sociales de nuestros gobernantes, cercanos y lejanos. El mismo título de la conocida Instrucción pastoral de la CEE de 2001 debería ya hacernos reflexionar sobre esta realidad: La familia, santuario de la vida y esperanza de la sociedad. Y es que sin una familia fuerte, la sociedad va sin rumbo,destinada al naufragio, perdida, sin esperanza alguna. Parafraseando el pensamiento de Benedicto XVI sobre Dios y el hombre podemos concluir con rotundidad: Sin la familia el hombre no sabe dónde ir ni logra entender quién es2.
Aunque la doctrina eclesial sobre la familia es muy extensa (Casti connubi, Humanae vitae, Familiaris Consortio, Mulieris dignitatem, Carta a las familias, Código de Derechocanónico,… ), vamos ahora a dirigir la mirada a los puntos de Caritas in veritate que se refieren a esta institución tan humana, tan eclesial, tan sacra... y tan social.
La familia, un tema social recurrente
Si vamos leyendo la encíclica que nos ocupa, vemos que en ella se desarrollan los más variados temas sociales: la globalización, el desarrollo, la alimentación, el trabajo,… Hay artículos, comoluego veremos, que se zambullen de lleno en la realidad de la familia y en su problemática, pero por otro lado parece a primera vista que muchos de ellos no tienen una conexión directa con el tema familiar. Sin embargo, como ya mencioné en la introducción, que en la génesis y desarrollo de estos problemas está la familia involucrada de lleno, bien como gestora de ellos o como sujeto paciente. Elhombre es un ser familiar, un Homo familiaris: todo lo que afecta al hombre afecta a la familia y viceversa.
Así queda claro lo que muy bien señala Benedicto XVI a lo largo de toda la Encíclica: la cuestión social es una cuestión que atañe a lo más profundo del hombre (y por ende a la familia, añadiría yo, si me lo permite su Santidad). Y yendo más allá, lo que el hombre es, sus necesidades ysueños más elevados, pero también sus egoísmos y miserias más enfangadas tienen reflejo en la sociedad, familia humana, que construimos3. La familia no está al margen de esto: si construimos familias llenas de valores, la familia de familias, la sociedad, estará llena de estos valores. Si llenamos los hogares de lo que no edifica al hombre, sino que lo esclaviza, tendremos una sociedad destruida y...