La flor del Cobre

Páginas: 5 (1169 palabras) Publicado: 20 de noviembre de 2013
LA FLOR DEL COBRE
 
Resulta que una vez había un matrimonio que vivía en un campito, cerca de un pueblo en el sur. Los dos eran viejos, reviejos. Y resulta que el ma­rido era tan flojo que nunca había trabajado en cosa alguna, y en cuan­to le hablaban de hacer algo, se quejaba a gritos de sus muchas enfermedades y se iba a la cama, diciendo que ya poco le iba faltando para entregar su ánima alTatita Dios. Y resulta también que la pobre mujer, a pesar de sus años, tenía que seguir comidiéndose para ella sola mantener el hogar.
Con la terrible pereza del marido, a quien llamaban don Quejumbre-No-Hace-Nada, el campito estaba hecho una maraña de zarzas y la casa se caía a pesar de los puntales que le habían arrimado algunos vecinos mise­ricordiosos. Pero esto no era impedimento para quedon Quejumbre-No-Hace-Nada siguiera durmiendo o lamentándose de sus males. Y resulta que un día estaba doña María Soplillo --que así se llamaba la mujer--zurciendo los pantalones de don Quejumbre-No-Hace-Nada cuando sintió que éste llegaba muy contento del pueblo, donde había ido en busca de remedios para las muelas.
Apenas la divisó le dijo:
--Figúrese la suerte, vieja...
--Usté dirá. Aunquesería mejor que diera antes las güenas tardes... --Güenas tardes. Pero no interrumpa. Figúrese la suerte... A la pri­mera güelta del camino me le encontré con una señora muy encachá, que me preguntó pa'ónde iba. Yo le contesté que pa'l pueblo a mercar medicinas pa'l dolor de muelas. Entonces ella me ice qu'es meica y que me puede dar un remedio no sólo pa' las muelas, sino que es pa' toititos losma­les conocíos. Y voy entonces yo y le pregunto: "¿Y qué remedio es ése, Misiá?" Y ella al tiro me contesta: "Es la Flor del Cobre". "No la conoz­co, ni nunca la había oído mentar", le respondí. Y ella va y me ice: "Aquí tiene la semilla, váyase para su campito y la siembra, y en cuanto florezca verá cómo se alivia de sus muchos achaques".
--¿Y qué le dio, vieja?
--Esta bolsita con semillas.Mire. Al tiro las voy a sembrar.
Entonces doña María Soplillo se puso en pie, muy contenta al ver a su marido tan dispuesto y alegre. Y le preguntó:
--¿Dónde las va'sembrar?
--Aquí, no más, en la huerta. Pero la Misiá me'ijo tamién que tenía que sembrarlas toas y en tierra limpia y bien barbechá. Por suerte que no son muchas las semillas.
Y don Quejumbre-No-Hace-Nada se fue en busca de la pala,el azadón y el rastrillo, que estaban por ahí, en un cuarto, todos llenos de telarañas y moho.
Por la tarde se pasó arreglando un retazo de tierra, sacando maleza, arrancando raíces, arando y rastrillando. Cuando llegó la puesta del sol estaba el retazo de huerta convertido en una lindeza de barbecho. Y don Quejumbre-No-Hace-Nada se fue a acostar completamente rendido, dispuesto a levantarse alalba para sembrar las semillas de la planta del co­bre, cuya flor había de mejorarle la salud.
Pero resulta que a la mañana siguiente, cuando comenzó a esparcir la semilla --que estaba en una bolsita de cuero no más grande que una mano cerrada-, ésta no terminaba nunca, y aunque don Quejumbre-No-Hace-Nada lanzaba grandes puñados al surco, el contenido de la bolsa no men­guaba. ¡Y ya no había dóndesembrar más!
--¿Qué haré? --le preguntó a doña María Soplillo.
--Usté sabrá --dijo la mujer modosamente--. Pero, según dijo usté ayer, la Misiá le recomendó que sembrara toititas las semillas.
--Así no más jué --dijo el viejo.
Y se puso a preparar otra porción de tierra más grande que la que barbechara la víspera.
Pero al día siguiente pasó exactamente lo mismo: la semilla no llevaba trazasde disminuir. Al gran holgazán de don Quejumbre-No-Hace-Nada le dieron ganas de no seguir en la empresa; pero, justamente, en ese mo­mento, le dieron unas fuertes punzadas en las muelas, tan fuertes como no las había sentido nunca. Y esto lo hizo decidirse a barbechar un peda­zo del potrerillo, en vista de que la huerta ya estaba toda sembrada y que las semillas parecía que no se hubieran...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • el cobre
  • Cobre
  • Cobre
  • Cobre
  • El Cobre
  • Cobre
  • Cobre
  • El cobre

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS