La iglesia y el concordato
Constituye un documento firmado en Roma, el 1 de mayo de 1862, entre el Plenipotenciario del Papa Pío IX, cardenal Jacobo Antonelli, y el Plenipotenciario delgobierno del Ecuador, Arcediano de la Catedral de Cuenca, D. Ignacio Ordóñez.
Fue la culminación de las afecciones clericales del presidente García Moreno y su gran pasión por el predominio religioso en elpaís.
«Por tal documento, se sometía toda la vida espiritual del Ecuador a sujeción y control absolutos de la Iglesia, inclusive la enseñanza pública y privada y la lectura de libros. Se establecíala religión única. Y se declaraba la fuerza pública a servicio de los obispos, para oponerse a la «maldad» (O. E. Reyes.- Breve Historia General del Ecuador, tomo II, p. 145).
Entre sus artículos másimportantes hay que anotar el tercero que dice: «La instrucción de la juventud en las universidades, colegios, facultades, escuelas públicas y privadas, será en todo conforme a la doctrina católica.Los obispos tendrán para ello el exclusivo derecho de designar los textos para la enseñanza, tanto de las ciencias eclesiásticas, como de la instrucción moral y religiosa...»
Y el artículo seis en laparte que dice «...así pues, el gobierno del Ecuador dispensará su poderoso patrocinio y apoyo a los obispos en los casos en que los soliciten, principalmente cuando deban oponerse a la maldad deaquellos hombres que intenten pervertir el ánimo de los fieles y corromper sus costumbres...»
A cambio de tales prerrogativas para la Iglesia, el Papa concedía al Presidente del Ecuador la facultad deproponer el nombramiento de obispos y arzobispos, nombrar eclesiásticos para las prebendas, dignidades y canonjías, etc.
En definitiva, el Concordato establecía la injerencia y el poder espiritual ymaterial de la Iglesia sobre el Estado ecuatoriano, y se constituía también en un vigoroso instrumento político para el gobernante teocrático.
El Concordato de 1862 fue roto el 27 de junio de 1877,...
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