La intervencion

Raimundo Mier Garza
La intervención en el campo antropológico. Una especie de práctica de lo imposible
 
Pensar la intervención es pensar el conocimiento en lo social, y no hay posibilidad de pensar el conocimiento en lo social sin pensar un modo específico de intervención; tampoco es posible pensar lo político sin entender que se trata al mismo tiempo de un proceso de conocimiento. Hay quepensar la intervención como un hecho de orden político y cognitivo, aseguró el doctor Raymundo Mier Garza, investigador de nuestra Unidad, al participar en el Seminario Interdisciplinario: Para pensar la intervención. Teorías, métodos y experiencias en el campo de lo social y las humanidades, organizado por el Área de Investigación de Procesos Grupales Institucionales y sus Interrelaciones.
 
Enla mirada del investigador, el tema de la intervención lleva una serie de ecos y de interrogantes sobre la creación de significaciones que es también la creación de alternativas políticas. Chomsky, ejemplificó, sostiene que todo pensamiento radical es un pensamiento de alternativas y no sólo de crítica; este planteamiento, afirmó, implica repensar qué es el conocimiento social y qué podemosentender y asumir como alternativa.

Señaló que en la medida en que se habla de conocimiento, se tiene que pensar en la tarea de la universidad pues, dijo, no son simplemente los problemas de la intervención en sí o de comprensión del proceso del conocimiento en lo social, sino pensar también en la tarea de la universidad pública, en su historia, en el momento particularmente delicado en que seencuentra, quizá frente a un punto de no retorno, en el proceso político contemporáneo.

 El doctor Raymundo Mier expuso que para utilizar la intervención es necesario pasar por una reflexión fundamental de la naturaleza y la dinámica de los vínculos y no solamente del vínculo como un hecho, como una experiencia, sino como una modalidad del devenir del sujeto y del propio vínculo, del devenir del modoparticular de objetivación de los vínculos y de la relación entre el vínculo y su objetivación.

El profesor de las maestrías en Comunicación y Política, y Psicología Social de Grupos e Instituciones y del doctorado en Ciencias Sociales de la Unidad, reveló que el vínculo acontece  y en ese sentido no deviene sino que emerge, puntúa, quebranta y al mismo tiempo desaparece. Vínculo, adelantó “eslo incalculable de una relación cuya calidad específica es escapar a toda regulación.”
  
La mirada antropológica renuncia a tener un lugar
 
Para explicar el vínculo que acontece permanentemente, el especialista remitió a la metáfora del “Rayo que no cesa” del narrador argentino Roberto Arlt. El rayo, sostuvo Mier Garza, es por definición instantáneo, momentáneo; es un fulgor que surge en unmomento, en un lugar y en un tiempo imprevisible de igual forma de aquello que define un modo de darse.
 
Compartió con los oyentes que su idea del vínculo surgió de una intervención de Mourice Blanchot, quien escribió a la muerte de su amigo George Bataille, una reflexión fundamental: “en realidad nada me vinculaba a George Bataille salvo la negatividad misma”. Es decir, destacó el pensador,el no ser, el no tener nada en común con él, el no construir nada en común, el no tener nada que regulara la amistad, el hacer de la amistad un permanente acontecer. Se trata, añadió, de esta idea del vínculo sin reglas que revela un modo de darse, un modo de relación con el otro en su radical otredad que cancela toda posible regulación. El vínculo, completó, es una extraña paradoja de estaintimidad y por ello pensar el conocimiento de lo social es hacerlo desde esta calidad otra de destino de la otredad como acontecer.
 
El filosofo y lingüista aclaró que desde –lo que llamó– la falaz etimología, intervenir es venir entre, lo que habla al menos, precisó, de romper toda posibilidad de dualismo, de introducir una calidad heterogénea radical entre toda relación dual, de cancelar toda...