La Muerte Cristiana

¿Qué será de nosotros?
«No queremos, hermanos, que estén en la ignorancia respecto de los muertos, para que no estén tristes como los demás, que no tienen esperanza. Porque si creemos que Jesús murió y resucitó; de la misma manera, Dios llevará consigo a quienes murieron en Jesús» (1Tes 4,13-14).
Con estas palabras San Pablo consolaba a los creyentes de Tesalónica, inciertos por el futuro desus seres queridos después de la muerte. El apóstol invita a no entristecerse como los paganos que no tienen esperanza, si Cristo ha muerto y resucitado, ahora el destino de los que creen en Él no será distinto.
Esa misma incertidumbre no solo la vivían los Tesalonicenses y las primeras comunidades cristianas, la experimentamos todos cuando reflexionamos acerca del misterio de la muerte.
Elmisterio de la muerte
Del tema de la muerte y de la resurrección de los muertos se habla poco. En la conciencia de muchos cristianos, la fe en esta resurrección se da de modo marginal. A esta fe ha venido a faltarle fuerza en este tiempo moderno, en que el hombre vive inmerso en esta “sociedad perfecta” donde la felicidad del individuo y de la colectividad se cree que puede obtenerse con los mediospresentes, concibiendo a la muerte como el final a dichas aspiraciones de felicidad.
Para poder tener una adecuada comprensión cristiana de la muerte y de la resurrección de los muertos, debemos partir de lo siguiente:
La muerte pertenece a la vida humana hasta tal punto que, sin ella, la misma vida no puede ser entendida. No es de extrañar el miedo a la muerte, no tan solo al misterioso momentode la interrupción de la vida, sino tal vez más, al proceso doloroso que nos lleva a ella. Por eso se entiende que cuando el hombre se esfuerza por conocer el sentido de sí mismo tenga que plantearse siempre, la cuestión del sentido de la muerte.
El misterio que implica la muerte se impone, pero a pesar de esta certeza y de la universalidad real de la muerte humana, han sido muchos los modos, y aveces casi opuestos entre sí, en que ha sido comprendida y explicada.
Se ha tratado de explicar diciendo que el hombre no sólo es un ser que en un futuro morirá, sino que de algún modo ya en esta vida está muriendo, y lo sabe. El hombre percibe la muerte como fin de su existencia en la tierra, específicamente como la ruina de la existencia corporal, como una ruptura de las relaciones que leunen con los demás hombres, consigo mismo, con sus proyectos y aspiraciones.
Otros la perciben como “algo” que no debería ocurrir, algo sencillamente intolerable y repugnante, algo metafísicamente deficiente. El hombre instintivamente opone resistencia al paulatino desmoronamiento de su vida que culmina en la muerte; la considera como el mal mayor de su existencia, el mal que de algún modoencierra, expresa y hace culminar todos los demás.
Otros más resisten a la muerte con tanta energía no sólo por la natural repugnancia al sufrimiento y a la degradación de la vida terrena que ella lleva consigo, sino más bien por la profunda aspiración que el hombre experimenta hacia la inmortalidad, es decir, hacia el desear quedarse de algún modo presente para siempre, sentimientos que se desvanecenante la destrucción que supone la muerte.
Con lo anterior deducimos el deseo que el hombre posee de inmortalidad, él ha tenido la intuición de que la vida, de alguna manera, no termina con la muerte, basta echar un vistazo a los más antiguos testimonios arqueológicos de la humanidad que son precisamente las tumbas, en las cuales podemos descubrir la idea que las diferentes culturas de todos lostiempos han tenido del más allá.
La inmortalidad es la posesión de la vida en su más alto poder, exclusión de la finitud del ser, el no poder sufrir la muerte. El hombre pretende alcanzar la inmortalidad con los recursos que tiene a su inmediata disposición, o bien con un intenso obrar propio, o bien por ser él mismo inmortal, desde siempre, y por ello, para siempre. Justo en este punto se...