LA MUJER COMO EJE DE DESARROLLO ANTE LA SUPREMAC A MASCULINA


LA MUJER COMO EJE DE DESARROLLO ANTE LA SUPREMACÍA MASCULINA.
La mujer se ha visto empobrecida en cuanto a sus capacidades, aptitudes y logros. La mujer, ha tenido a lo largo de la historia un lugar sexuado dentro de su entorno; ha sido discriminada al solicitar un empleo, al querer ocupar un lugar en la vida política de su comunidad, al percibir un salario, al competir con el hombre, allevantar la voz para exigir igualdad en las condiciones de género. La mujer ha sido rechazada, humillada, sobrevalorada y explotada, y sí, hay una explicación; “la mujer, es el sexo débil”
Mi nombre es Crista Isabel Montoya Beltrán. Alumna de 7° semestre, sistema semiescolarizado de la Unidad Académica de Derecho de nuestra Alma Mater, UAZ, y he venido a tratar de crear conciencia al exponerles mi tema,que lleva por título: “La Mujer, como eje de desarrollo ante la supremacía masculina”
Desde tiempos inmemorables, la lucha de sexos ha formado parte de la vida. Y digo vida, como tal, porque no es algo que solo se derive de las relaciones humanas, sino que, donde haya una hembra y un macho, habrá como consecuencia una lucha constante, no solo por sobrevivir, sino por ganar un lugar digno dentrodel grupo al que pertenezcan. Las personas jugamos roles sociales, cada uno, inconscientemente, nos colocamos en el que mejor sabemos sobrellevar. Actuamos conforme nos dicta la razón y el ego; la razón, la utilizamos para ubicar, conforme a nuestras capacidades, el lugar en el que debemos enrolarnos; el ego nos guía a ubicarnos en un lugar en el que logremos ser plenamente reconocidos yadmirados.
La supremacía masculina ha prevalecido mucho más y por encima de la autoridad femenina. La fuerza física que por naturaleza le corresponde al hombre, ha sido sino el más importante, un factor decisivo para permitir y otorgar un lugar privilegiado a los hombres en las relaciones diarias de convivencia humana. La sumisión femenina ante los hombres se convirtió en un requisito de vida que hasta lafecha subsiste y así seguirá, mientras la autoridad se delegue al que tiene más fuerza y se nieguen las riendas a una mujer “dubitativa” y “frágil”.
Las mujeres ante los hombres juegan un rol de seres pro creativos, sutiles, amorosos y serviciales; y estas se desenvuelven bajo la sombra de una figura masculina que reprobará todo lo que a su pensar esté en contra de lo que una mujer como tal debecuidar, para no caer en señalamientos, por haber equiparado su comportamiento al de los hombres. Mientras que el rol masculino se desarrolla dentro de un ambiente desahogado, burdo y en ocasiones hostil. Más allá de lo malo que pueda ser o hacer, el hombre tiene por naturaleza la dispensa social, lo cual no sólo significa desequilibrio entre los roles, sino que pone en un lugar crítico a lasmujeres, que no pueden tener una vida similar a la de un hombre, porque esto conlleva desaprobación social y limitaciones a realizarse profesional, emocional, y productivamente. Ciertamente ha habido una evolución significativa conforme a la sumisión femenina ante la masculinidad, en cuanto a los roles que cada uno “debería” desempeñar. Ahora, aunque sigue siendo preferible ver a las mujeres servicialesy en su papel de cuidadoras, es considerable la cantidad que se han dispuesto a competir firmemente con el hombre por obtener un lugar social, en el que se le reconozca la capacidad de jugar un rol que siempre ha sido de dominio masculino, por su supuesta superioridad ante la mujer.
Ser mujer implica emociones, capacidad y entereza. Ser mujer no debería minimizarse por nadie. Se ve comonaturalizado el que la mujer juegue un papel de cuidadora de los hijos y del hogar, cuando los hombres poseen la misma capacidad para desempeñar actividades “meramente” femeninas.
Los cuidados y las oportunidades son fundamentales para el sostenimiento de la vida y el bienestar físico, psicológico, emocional y social de las personas. Garantizarlos es una responsabilidad del Estado, como también lo es...