La tala de árboles y el daño al medio ambiente

La denuncia de un cacique de la comunidad aborigen de Solco Yampa contra la tala y deforestacin indiscriminada de rboles autctonos en la zona de Arcadia -al sur de nuestra provincia- reactualiza uninveterado problema que parece no tener respuesta en Tucumn la progresiva destruccin de su medio ambiente.Se trata de un asunto que cada tanto irrumpe en la opinin pblica -a veces por advertencias comoesta, otras por algn tipo de incidente que se provoca, o por tareas de investigaciones periodsticas- y que luego de un tiempo de repercusiones vuelve a quedar fuera del foco de atencin. Pese a lagravedad que lleva implcita la comprobacin del dao que se infringe a la naturaleza, pareciera que el tema no encuentra una solucin de peso de parte de las autoridades competentes o de sectoresinstitucionales y sociales que deberan mostrar respuestas. Sin embargo, la envergadura de esta denuncia excede a otras, en razn de que el lder de la comunidad aborigen culpa y responsabiliza a un legislador deloficialismo de promover la destruccin de cedros, cebiles y tipas para promover la produccin de limones. Mientras avanzan iniciativas y trmites en la Legislatura para determinar si hay una violacin alas leyes y reglamentaciones vigentes de parte de uno de sus miembros, lo que llama especialmente la atencin de la opinin pblica -precisamente- es la responsabilidad institucional de la personainvolucrada en la deforestacin.Como se sabe, una de las mayores amenazas para la vida del hombre en la Tierra es la deforestacin. Esta actividad que implica desnudar el planeta de sus bosques y de otrosecosistemas como de su suelo, tiene como resultado un efecto similar al de quemar la piel de un ser humano. Es que los rboles ayudan a mantener el equilibrio ecolgico y la biodiversidad, limitan laerosin en las cuencas hidrogrficas e influyen en las variaciones del tiempo y en el clima. Y abastecen a las comunidades rurales de diversos productos, como la madera, alimentos, combustible, forrajes,...