Leopoldo (sus trabajos)


¿Seremos algún día verdaderos escritores?
Al leer Leopoldo (sus trabajos), es muy impresionante ver la facilidad con la que uno puede llegar a ser como él, y es que la cultura de “dejarlo todo a la última hora” no sé si sea simple costumbre del mexicano o es una enseñanza de la despreocupación, de la búsqueda constante de pretextos para no afrontar y perseverar en lo que se quiere, la faltade responsabilidad ante las obligaciones que se ha tomado la molestia de elegir.
Ahora bien, si todo esto es cierto, ¿entonces cuál es el futuro que nos espera como escritores? Durante los años de la licenciatura, vivimos en un estado de letargo. Sí, las actividades curriculares requeridas son llevadas a cabo pero, ¿qué más? Los que están en la preespecialidad de periodismo o medios escritos, ¿enverdad escriben? O les pasa como a Leopoldo, que se dicen ser escritores y, nada. Sólo escriben para la escuela, para el trabajo, pero no para sí. Ahí entra otro cuestionamiento: ¿qué tipo de escritor quiero ser? Todas estas, son preguntas que la mayoría de escritos ni siquiera se realizan, no hacen un autoanálisis respecto a las expectativas, a las metas.
La palabra escribir, como definicióntiene que es el acto de representar las ideas, pensamientos o palabras con letras u otros signos trazados en papel o cualquier superficie. Para los de medios escritos hay de dos: la primera, sólo quieren cumplir su deber de informar a la gente, de relatar lo sucedido, de investigar, llevar a fondo una noticia, adentrarse en los hechos, incluso contar algún día sus memorias (si es que laspreservan); o la segunda, estudian periodismo porque se sienten escritores frustrados, porque no les quedó de otra más que cursar esa licenciatura, porque es la cosa más cercana para “aprender a escribir”, ¿será? Leopoldo siempre se mantenía en un aprendizaje incesante, buscaba a través de los libros empaparse de toda la información y sabiduría que pudiese, pero claro, eso no le fue nunca suficiente parapoder escribir algo decente, el dicho de: el conocimiento lo es todo, no es así. También es la práctica, la habilidad. Nunca se puede llegar a ser un buen escritor si no se tiene el hábito de hacerlo, por más mínima que la escritura sea, la lluvia de ideas y reflexiones tiene que quedar plasmada en alguna parte, o por lo menos debería.
La actitud tampoco es suficiente. El acto de posar, depretender algo que no es, definitivamente no cambia en nada las cosas. La creación de una reputación no le desarrolló esa capacidad que le era necesaria, que imperaba sobre todas las cosas: escribir. La buena pluma no se es, se hace. El porte, sí, verdaderamente es bueno pero la pericia impera más. Y si entonces así están las cosas, si así como él, pretendemos ser lo que en realidad no somos, ¿la escuelainfluirá en esa cosa llamada cambio, un cambio que erradique todo mal hábito o sólo está en nosotros? Escritores famosos, previamente a ser eso, famosos, no contaron con una educación, al contrario, comenzaron a escribir y después mantuvieron sus estudios. Se especializaron en algo o temas que les fueran de su interés pero no estudiaron para ser novelistas, poetas, dramaturgos o ensayistas.
Sedice que los que nos encontramos en escritos, somos mejor con el manejo del lenguaje. Leopoldo conocía todo al respecto, y a la hora de impregnar sus pensamientos en papel, nada. Todo era un rotundo fracaso. Las diferentes circunstancias que lo llevaron hasta la posición en la que se encontraba fue una simple casualidad, una terrible, al menos para él, porque por más que lo intentase, laincapacidad y el fracaso siempre iban a estar allí. Ahora bien, por qué nos encontramos estudiando esto, ¿es realmente porque así lo queremos? Arribamos a la universidad con el sueño de que nos convertiremos en escritores, de que por fin toda esa imaginación, esas grandes obras literarias, leídas en la juventud, nos convertirán en un Cortázar, un Sábato, un Arreola, un Vargas Llosa, un Monterroso… pero...