Los cuatro acuerdos

TÍTULO: LOS CUATRO ACUERDOS, un libro de sabiduría tolteca
AUTOR: Dr. Miguel Ruiz

1. Comentario general de la lectura

Este libro contiene de una manera sencilla y clara la base para la felicidad y la tranquilidad. Para ello, es necesario adoptar cuatro principios básicos, que aplicados conjuntamente conforman una poderosa herramienta para afrontar la vida de una manera plena y libre,sin ataduras, victimismo o delegaciones.

Para su aplicación es necesario un gran nivel de consciencia, fruto de la introspección. Una vez interiorizados los cuatro principios, deben aplicarse y ejecutarse con responsabilidad, voluntad y compromiso.

Su aplicación práctica deberá llevarse a cabo con perseverancia y constancia férrea, dado que la incorporación de esta nueva forma de conducirnosen la vida requiere de un alto grado de disciplina. Tal y como se dice en el libro “El monje que vendió su Ferrari” de Robin Sharma, “todo cambio duradero requiere tiempo y esfuerzo. La perseverancia es la madre del cambio personal”.

En este libro se alberga la idea principal del COACHING: la acción. “Lo que realmente hará que las cosas cambien es la acción. Actuar una y otra vez fortalece tuvoluntad, nutre la semilla y establece una base sólida para que el nuevo hábito se desarrolle”.

El cuarto principio incita a hacer siempre lo máximo que puedas, ni más ni menos, independientemente del resultado, sin esperar una recompensa, simplemente por el placer de realizar lo que haces.

Asegura el autor del libro que la ACCIÓN es lo que te hará sentir inmensamente feliz, dado que siempreque haces lo máximo que puedes, actúas.

1. Sé impecable con tus palabras


IMPECABLE, viene del latín, y significa SIN PECADO.

Mi pequeña sobrina de 3 añitos, Maider, ya ha captado la fuerza de las palabras. Un día al salir de la ikastola, tuvo esta conversación con su amatxu:


MAIDER: “ama, no hay que insultar a nadie”
AMA: claro que no, eso está malMAIDER: si le dices algo feo a alguien, le haces daño en el corazón
AMA, asustada por la reflexión tan sabia y profunda de su hijita: muy bien. Esto os lo ha dicho la andereño, verdad?
MAIDER: no… si a mí alguien me llama “tonta”, me hace daño en el corazón. No hay que decir cosas malas…
Mi hermana emocionada, la abrazó y sintió dolor en su corazón, por ser consciente de lasensibilidad de su hija; “esto la hará sufrir”, pensó.
Por mi parte, soy consciente de que esta niña tiene una gran sensibilidad, lo que considero un don, por lo hay que alimentarlo, proporcionándole herramientas para que no haga mella en ella todas las situaciones feas que vivimos al día. El segundo principio le será de ayuda: “no te tomes nada personalmente”.

Pero mi sobrina, al no disponer aún deuna desarrollada capacidad para el diálogo interno, desconoce que somos nosotros mismos quienes con el paso del tiempo nos infligimos los mayores de los castigos, vertemos contra nosotros mismos las peores de las palabras y pensamientos. Así se recoge en el libro: “nadie nos maltrata más que nosotros mismos (…) nuestra manera de juzgarnos es la peor que existe (…) nadie, en toda tu vida, te hamaltratado más que tú mismo (…).

Es por ello que, tal y como dice el libro, “ un pecado es cualquier cosa que haces y que va contra ti”. Y por ello, debemos tratar de ser impecables con nosotros mismos: “ser impecable es no ir contra ti mismo. Cuando eres impecable, asumes la responsabilidad de tus actos, pero sin juzgarte ni culparte”.

Para la asunción de este principio, en primer lugar, sedebe cambiar la manera de tratarse a uno mismo, y la manera de tratar a otras personas, especialmente aquellas a las que más quieres.

Mi sobrina, con sólo 3 añitos, ya ha experimentado el poder de las palabras. “Las palabras son la encarnación verbal del poder”, tal y como se recoge en el libro antes mencionado de Sharma. Pero las palabras tienen ese poder porque dejamos que germinen en...