Margareth

Era un día como cualquier otro caminaba como siempre lo hacía, ya andaba acostumbrada a levantarme por las mañanas y hacer lo mismo, cuando digo lo mismo, es que cuando abro mis ojos, tomo el primer cigarrillo de mi mesa de noche y le doy lo buenos dias al sol y el sol me da los buenos días a mí, resplandeciendo como todas las mañanas lo hace, después me dispongo a leer los mensajes de texto queme deja mi madre y le respondo con pocas palabras que son “ buenos días mama”, camino hacia el baño tomo mi ducha de agua caliente, y después de todo ese recorrido me dispongo a caminar como todo los días las largas calles y ceras de un pequeño pueblo llamado sombody , ese dia como siempre vi a la señora presno que salía a recoger el periódico y me veía con una amplia sonrisa. Cuando llego alsitio en donde me siento todas mi mañanas que es un pequeño banco que está situado en una parada de autobús pintado de un color verde pastel y con poster publicitario de diferentes marcas, siempre veo como suben y bajan personas de distintos lugares, claro una de ellas fui yo, que me mude a este pueblo hace un año y medio, y desde que me mude aquí todos los días ha sido lo mismo sin nada relevanteque resalte entre las calles.
Cuando saco otro cigarrillo de mi bolsito, aparece una chica con cabello negro tan negro como la noche, su piel pálida con un vestido que se veía de una muy buena marca, aunque no pueda detallar la marca de su ropa , no puedo ver su rostro porque andaba cubierto por su larga melena negra, en unos cinco minuto voltea y me mira muy fijamente, su cara precia igual queuna imagen religiosa, no es que quiera decir que fuera religiosa sino más bien como esculpida su nariz perfilada sus ojos de un color miel con largas pestañas sus labios combinaba perfectamente con su cara tan angelical, quede hipnotizada de su hermosura que pareciera que brillada cada lugar que estaba, con una voz tan dulce me pregunta.
-Usted me podría decir que hora son?- me dijo con una voztan suave y dulce que jamás había escuchado.
-claro no tengo problema- miro mi reloj y me dispongo a decirle la hora, con mi voz tan tímida como nunca- son las 11 de la mañana
-muchas gracias – me miro por un rato y se dispuso a mirar el lago que estaba al frente de nosotras.
Después de un rato el autobús llego y esa chica se dispone a levantarse y antes de subirse, voltea un poco su cabeza yse despide con una sonrisa. Yo después de eso, como siempre veía como la gente subía y baja del autobús, cuando eran casi las cinco de la tarde me dispuse a irme del banco, llegue a un restaurant que estaba siendo inaugurado ese día, cuando entro estaba diseño como si estuviéramos en Francia teniendo la torre ifel en la entrada del restaurant, cuando entro un camarero me atiende y me lleva unamesa adornada con una vela derretida y un vino muy fino me pide la orden y le digo lo que quiero para comer.

Cuando el camarero regresa, trae mi comida que era un browni de chocolate con unos espaguetis y una copa para servirme el vino que estaba en mi mesa. Ya de un rato que termino de comer llamo al camarero para pedirle la cuenta, ya de ahí salgo del restaurant y me voy a mi casa de nuevo.Cuando llego veo todos los mensajes que mi madre deja en mi celular, me voy a la cama pensando aun en esa chica de la mañana, no dejaba de pensar en su rostro tan perfectos tan hermosos me sentía muy arrebatada, rara y hasta con ganas de verla, dure un rato pensando en esa chica hasta que por fin caí en el sueño.
Al día siguiente me levante y hago el mismo procedimiento del día anterior, pero conalgo distinto, no podía dejar de pensar en esa chica de ayer su belleza me cautivo no podía quitármela de la cabeza, como siempre le di los buenos dias al sol y ni siquiera le envié el mensaje como siempre a mi madre estaba tan concentrada en mis pensamientos de como se llamara esa chica, salgo como corriendo de mi casa teniendo esperanza de encontrarla de nuevo, cuando llego al banco solo se...