mas es mejor
Ricardo llevaba una vida rutinaria. Tenía cuarenta y ocho años, hacía veinticinco que trabajaba en la misma oficina y seis que se había separado de su mujer. No tenía hijos y la escazafamilia que le quedaba vivía en la provincia, así que no los veía muy seguido. Salía muy poco, ya que sus amigos estaban casados o con hijos y poco tiempo para él.
Desde que se separó vivía en unpequeño departamento que alquilaba.
Esa tarde, como todas, salió de la oficina y se dirigió a la estación para abordar el tren de las siete de la tarde. Siempre se sentaba del lado de la ventanillay viajaba mirando hacia afuera para evitar conversaciones, con sus ocasionales compañeros de viaje, sobre temas tales como: ¡Que calor!, ¡Que frío!, Parece que va a llover, Ya casi llegamos a fin deaño, etc, etc,.
Esa tarde algo interrumpió la monotonía del viaje. En la estación siguiente a la que él subía, su tren se cruzaba con otro y lo hacían muy lentamente; así que los pasajeros de ambosse miraban de ventanilla a ventanilla con sus rostros cansados e inexpresivos.
De pronto, a través de la pequeña ventanilla redonda de una de las puertas vió asomar unos ojos, eran los ojos másbellos que jamás haya visto. Se apoyó contra el vidrio y se fué estirando lo más que pudo hasta perderla de vista. Estaba seguro que ella también lo había seguido con la mirada.
Durante cuatro díasse repitió la situación. Esos ojos lo tenían obsesionado.
El fin de semana lo decidió. La conocería.
El lunes salió antes del trabajo y tomó el tren pasando tres estaciones desde la que secruzaban, ya que no sabía donde ella lo abordaba.
Cruzó el andén y subió al tren en el que ella viajaba.
Estaba nervioso, tanto había pensado en esos ojos que sentía que ya amaba a esa mujer.Recorrió el tren despacio, observando a la gente, hasta que llegó a la puerta. No había nadie.
Tal vez suba en la próxima, pensó. Pero eso no ocurrió.
El tren ya estaba en la estación donde se...
Regístrate para leer el documento completo.