Medicina

Hoy toca de nuevo ir al instituto, la rutina de siempre, aguantar a los profesores diciendo los sermones de siempre, que siéntate bien, haz los deberes, saca los libros, no hables en clase, con esa actitud no llegaras a nada…. Estamos a 18 de febrero un lunes, después de un fin de semana muy divertido con mis amigos de siempre, fumando, riéndonos, y ahora ir al instituto ¡vaya paliza!
Despuésde un largo día en el instituto ahora volver a casa para ver la tele y estar tumbada en el sofá.
-Ya has llegado del instituto, ehh.
-No, Mamá. Respondí con sarcasmo.
-¿Ya estamos otra vez? ¿Qué tal te ha ido hoy?
-Bien, no hemos hecho nada interesante, igual que todos los días, escuchando a los profesores diciendo cosas que después de mayor no me van a servir de nada.
-Venga Laura, notengas esa manera de pensar. Tienes que estudiar para después poder tener un buen trabajo de mayor.
-Puf… para eso queda mucho.
-Bueno me voy a hacer la comida, ¿Qué te apetece comer?
-No sé, lo que quieras, me da igual.
- Vale, haré pollo a la plancha y ensalada. ¿Te parece bien?
-Sí.
Voy a llamar a María a ver si quedamos hoy.
-¡Ya está la comida, ven a por ella!
-Vale, ¡ahoravoy!
-Tiene buena pinta.
-Lo hice como a ti te gusta, Laura.
Estuvimos hablando un buen rato durante la comida. Pero después, mientras veíamos la tele sacó el tema de siempre, que si olía a marihuana, que si he vuelto a fumar, pero a ella qué le importa que yo fume o deje de fumar.
-Laura, ya sabes lo que te digo cuando huele a marihuana. Se puede saber por qué has vuelto a fumar.
-¡Y a tiqué te importa. Yo hago lo que me dé la gana, tú no me mandas!
-A mí no me hables con esos tonitos ehh… que soy tu madre, no soy cualquiera para que me puedas hablar así.
-Yo te hablo como yo quiera.
-Ya hablaremos cuando llegue tu padre de trabajar a ver qué dices.
-Pues vale, me da igual que venga y hablamos.
Me levanté de una vez del sofá, cogí las llaves de casa, el casco de la moto yme largué de allí. Estaba harta de que me chillase cada vez que se enteraba de que fumaba a marihuana. Me fui a casa de mi mejor amiga y se lo conté todo. Se quedó flipando por el comportamiento que tuvo mi madre.
Era una chica de aproximadamente 1.68m de alta, delgada, su pelo era negro oscuro, muy oscuro, tenía los ojos azules grisáceos, en los bordes de la pupila tenía una mezcla de colores,entre naranja, verde y marrón, le cambiaba de color depende de el tono de luz que hacía. Llevaba siempre ropa que estaba rota, los pantalones sobretodo, estaban rotos por todas partes desde los cuádriceps hasta los gemelos más o menos. Las camisetas estaban pintadas como ella quería.
Le dije que quedáramos con Alex, Jose, Álvaro, Raúl, Vanessa, Ainhoa, Andrea y Cristina, para ir a la discotecaesta noche y olvidarnos un poco de todo durante un rato. Ella me dijo que le parecía bien.
Llamamos a todos y todos, menos Jose podían salir.
Quedaríamos en la "Fuente de las Ranas" para irnos de ahí todos juntos, yo llevaría a Ana, mi mejor amiga, en mi moto. Raúl llevaría a Álvaro, Alex, Vanessa y Ainhoa en su coche, y Cristina llevaría en su moto a Andrea.
-Bueno, Ana, me voy a mi casa aprepararme para esta noche. A las 8 vengo a tu casa y a las nueve menos cuarto nos vemos para estar a las 9 en la "Fuente de las Ranas".
-Vale, Laura. Nos vemos de aquí a un rato. Cuídate.
Nos dimos dos besos de despedida y me fui a mi casa. Allí me esperaba mi madre. No quería entrar en casa, pero tenía que entrar porque ahí es donde están todas mis cosas. Tendría que aguantar lo que me dijera.
Me encontré a mi madre en la cocina, lavando los platos. Le empecé a hablar:
-Hola, Mamá. Lo siento por haberme ido así, pero es que no me gusta cuando me empiezas a chillar por una tontería.
-Hola, Laura, ¿A dónde has estado?
-Me fui a casa de Ana y estuvimos hablando.
-Ah, vale, pero no digas que es una tontería que fumes marihuana. Todavía eres muy joven para que te estropees la...