Memoria Actos Propios
Páginas: 100 (24886 palabras)
Publicado: 12 de octubre de 2011
INTRODUCCIÓN
Desde hace ya algún tiempo se ha ventilado en los distintos escenarios jurídicos el antiguo principio “VENIRE CUM FACTUM PROPRIUM NON VALET”, que señala que “no puede irse validamente contra los actos propios.”[1]
Para algunos es éste un principio jurídico amparado en la buena fe, aunque para otros es una regla de derecho que obedece a una “proposición de lógicajurídica”[2], por cuanto a nadie le es permitido contrariar una conducta válida para el derecho, abusando de él, no tomando como sentido último, el valor que ha de atribuirse a la justicia como pilar fundamental.
Queda en clara evidencia que nuestro legislador civil tomó instituciones del Derecho Romano y que, obviamente, depurados por el legislador francés, inspirado en los principios de laRevolución Francesa que con tanto acierto el gran Emperador imprimió en la legislación privada del mundo occidental, ampara la buena fe, que inspira todo el sistema jurídico actual que, como derivado de la justicia, se presume como más adelante se verá, en oposición a la mala fe, que deberá probarse.
Hemos dicho y trataremos así acreditarlo, que el “VENIRE CUM FACTUM PROPRIUM NON VALET”encuentra perfecto asidero en nuestra legislación; y la jurisprudencia comienza a ser relevante sobre la materia.
Desde luego, cabe advertir, que el principio o la teoría, opera no sólo en el campo del derecho civil moderno, sino que también podemos afirmar que es una doctrina de amplia aplicación práctica en las otras ramas del derecho.
La regla general según la cual no puede venirsecontra los propios actos, negando efecto jurídico a la conducta contraria, se asienta en la buena fe objetiva o, dicho de otra manera, en la protección a la confianza que el acto o conducta suscita objetivamente en otra u en otras personas.
El centro de gravedad de la regla no reside en la voluntad de su autor, sino en la confianza generada en terceros, ni se trata de ver una manifestacióndel valor de una declaración de voluntad negocial manifestada por hechos o actos concluyentes.
No es la regla una derivación de la doctrina del negocio jurídico, sino que tiene una sustantividad propia, asentada en el principio general de la buena fe y la riqueza del contenido hace que los estudiosos del derecho le presten atención, para así poder utilizar una herramienta útil que ponelímite a pretensiones infundadas.
En efecto, en las relaciones jurídicas suelen crearse apariencias que el ordenamiento debe resguardar, en orden a que el contratante, o la persona que esté de buena fe, no se vea perjudicada en sus derechos y, para poder tratar el tema que nos ocupa, es necesaria una revisión de sus antecedentes históricos, conceptos, características yrequisitos para luego pasar a revisar la aplicación que la doctrina y jurisprudencia –chilena y extranjera- le ha dado.
IMPORTANCIA DEL TEMA
El fundamento de la teoría de los actos propios se ha buscado por dos lados diferentes. Por un lado, se dice que esta regla protege la buena fe depositada en la apariencia jurídica creada por el primer acto; por el otro, se afirma que lo que seprotege es la confianza en un comportamiento coherente.
Diferimos con ciertos autores que piensan que la Teoría de los Actos Propios ha de entenderse como un Principio General del Derecho, y afirmamos al igual que Diez- Picazo que se trata de una regla de derecho, por cuanto ella deriva de un principio superior cual es el principio general de la buena fe.
Ahora bien, comoconsecuencia de la inadmisibilidad de la conducta contradictoria, podemos afirmar que desaparece la presunción de buena fe del sujeto activo, a la cual se refiere el Artículo 707 del Código Civil[3]. Quien ejecuta una conducta contradictoria, actúa de mala fe, ya que nos parece lógico dejar claro que quien obra de esa forma, tiene plena conciencia de sus propios actos. Por lo mismo, cabe hacer...
Desde hace ya algún tiempo se ha ventilado en los distintos escenarios jurídicos el antiguo principio “VENIRE CUM FACTUM PROPRIUM NON VALET”, que señala que “no puede irse validamente contra los actos propios.”[1]
Para algunos es éste un principio jurídico amparado en la buena fe, aunque para otros es una regla de derecho que obedece a una “proposición de lógicajurídica”[2], por cuanto a nadie le es permitido contrariar una conducta válida para el derecho, abusando de él, no tomando como sentido último, el valor que ha de atribuirse a la justicia como pilar fundamental.
Queda en clara evidencia que nuestro legislador civil tomó instituciones del Derecho Romano y que, obviamente, depurados por el legislador francés, inspirado en los principios de laRevolución Francesa que con tanto acierto el gran Emperador imprimió en la legislación privada del mundo occidental, ampara la buena fe, que inspira todo el sistema jurídico actual que, como derivado de la justicia, se presume como más adelante se verá, en oposición a la mala fe, que deberá probarse.
Hemos dicho y trataremos así acreditarlo, que el “VENIRE CUM FACTUM PROPRIUM NON VALET”encuentra perfecto asidero en nuestra legislación; y la jurisprudencia comienza a ser relevante sobre la materia.
Desde luego, cabe advertir, que el principio o la teoría, opera no sólo en el campo del derecho civil moderno, sino que también podemos afirmar que es una doctrina de amplia aplicación práctica en las otras ramas del derecho.
La regla general según la cual no puede venirsecontra los propios actos, negando efecto jurídico a la conducta contraria, se asienta en la buena fe objetiva o, dicho de otra manera, en la protección a la confianza que el acto o conducta suscita objetivamente en otra u en otras personas.
El centro de gravedad de la regla no reside en la voluntad de su autor, sino en la confianza generada en terceros, ni se trata de ver una manifestacióndel valor de una declaración de voluntad negocial manifestada por hechos o actos concluyentes.
No es la regla una derivación de la doctrina del negocio jurídico, sino que tiene una sustantividad propia, asentada en el principio general de la buena fe y la riqueza del contenido hace que los estudiosos del derecho le presten atención, para así poder utilizar una herramienta útil que ponelímite a pretensiones infundadas.
En efecto, en las relaciones jurídicas suelen crearse apariencias que el ordenamiento debe resguardar, en orden a que el contratante, o la persona que esté de buena fe, no se vea perjudicada en sus derechos y, para poder tratar el tema que nos ocupa, es necesaria una revisión de sus antecedentes históricos, conceptos, características yrequisitos para luego pasar a revisar la aplicación que la doctrina y jurisprudencia –chilena y extranjera- le ha dado.
IMPORTANCIA DEL TEMA
El fundamento de la teoría de los actos propios se ha buscado por dos lados diferentes. Por un lado, se dice que esta regla protege la buena fe depositada en la apariencia jurídica creada por el primer acto; por el otro, se afirma que lo que seprotege es la confianza en un comportamiento coherente.
Diferimos con ciertos autores que piensan que la Teoría de los Actos Propios ha de entenderse como un Principio General del Derecho, y afirmamos al igual que Diez- Picazo que se trata de una regla de derecho, por cuanto ella deriva de un principio superior cual es el principio general de la buena fe.
Ahora bien, comoconsecuencia de la inadmisibilidad de la conducta contradictoria, podemos afirmar que desaparece la presunción de buena fe del sujeto activo, a la cual se refiere el Artículo 707 del Código Civil[3]. Quien ejecuta una conducta contradictoria, actúa de mala fe, ya que nos parece lógico dejar claro que quien obra de esa forma, tiene plena conciencia de sus propios actos. Por lo mismo, cabe hacer...
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