Mito, novela y profesia en los textos del inca garcilaso

MITO, NOVELA Y PROFESÍA EN LOS TEXTOS DEL INCA GARCILASO

CAPITULO I

LA MUERTE Y LA REGENERACION DEL TIEMPO

RECONCILIACIÓN CON LA TUMBA

Según la placa recordatoria colocada en la Capilla de las Ánimas de la Catedral de Córdoba, el Inca Garcilaso de la Vega habría fallecido el 22 de abril de 1616. Esta fecha, no obstante, es insegura en cuanto al día, porque de acuerdo al inventario desus bienes de fecha 26 ("atento que a tres días que el dicho Garcilaso de la Vega fallesció") habría muerto el 23, al propio tiempo que Miguel de Cervantes. Aunque puede ser también que el deceso del Inca haya ocurrido el 24, según consta en su partida de defunción. En cuanto al lugar en que murió el cronista es menos inseguro que el momento. Aurelio Miró Quesada menciona la calle del Deán o delos Deanes, aunque a veces por error se indica el Hospital de la Limpia Concepción.
Cuando murió Garcilaso contaba 77 añoHs; Cervantes, 69. Ambos tenían entonces una edad en que la incertidumbresobre el lugar y la hora de la muerte ofrece un margen de duda siempre menor. Cervantes, prefigurando quizá el lugar que ocuparía después como Príncipe de los Ingenios Españoles, murió en Madrid, porentonces la residencia de la corte y luego la capital de España. Garcilaso, el primer americano que tomó la muerte "en la mano de la Madre Patria", prefirió morir en Córdoba, la antigua capital árabe de España, que tanto le recordaba su ciudad nativa, el Cuzco, la antigua capital del Imperio de los Incas.
En cuanto a la hora, parece que se le adelantó a Cervantes, apurando su despedida que empieza conuna antigua copla, que a su pesar siente que viene a pelo en la postrera epístola que dirige al Conde de Lemos:

“Puesto ya el pie en el estribo,
con las ansias de la muerte,
gran señor, ésta te escribo

Ayer me dieron la extremaunción... el tiempo es breve, las ansias crecen, las esperanzas menguan, y, con todo esto, llevo la vida sobre el deseo que tengo de vivir". Un día antes,Garcilaso, también con el pie en el estribo, redacta su testamento y con las mayores muestras de resignación cristiana o de estoicismo indio espera la llegada de la muerte. La sepultura está dispuesta, porque adelantándose a los preparativos de la hora póstuma, ya en 1612 había adquirido la Capilla de la Ánimas del Purgatorio, "que había erigido y adornado a su costa". El epitafio también está compuesto:"El Inca Garcilaso de la Vega, Varón insigne, digno de perpetua memoria, Ilustre en sangre, Perito en Letras, Valiente en armas, Hijo de Garcilaso de la Vega, de las casas ducales de Feria e Infantado, y de Elisabeth Palla, hermana de Huayna Capac, último Emperador de Indias. Comentó "La Florida", tradujo a León Hebreo y compuso los "Comentarios Reales". Vivió en Córdoba con mucha religión, murióejemplar; dotó esta capilla; enterróse en ella; vinculó sus bienes al sufragio de las ánimas del Purgatorio: son patronos perpetuos el Deán y Cabildo de esta Santa Iglesia. Falleció la XXII de abril de MDCXVl'.
Y su último libro, la segunda parte de los Comentarios Reales, espera poder salir pronto a luz con esta especie de oración fúnebre que cierra su opus magnum:
"La Divina Majestad, Padre,Hijo y Espíritu Santo, tres personas y un solo Dios verdadero, sea loada por todos los siglos de los siglos, que tanta merced me ha hecho en querer que llegase a este punto. Sea para gloria y honra de su nombre divino, cuya infinita misericordia, mediante la sangre de Nuestro SeñorJesucristo y la intercesión de la siempre Virgen María, su Madre, y de toda su corte celestial, sea en mi favor yamparo, ahora y en la hora de mi muerte, amén, Jesús, cien mil veces Jesús"
Si pudiera imaginarse que Cervantes y Garcilaso hubiesen tenido que hacerse compañía en el viaje al más allá, seguramente que luego de las respectivas presentaciones, ya que en vida no pudieron conocerse sino por medio de sus obras, habrían terminado hablando seguramente de sus trabajos inconclusos. Cervantes le confiaría...