Muller

 Dramaturgo alemán cuya carrera empezó en la antigua República Democrática Alemana (Alemania Oriental). Müller nació en Eppendorf (Sajonia), el 9 de enero de 1929. En los últimos días de la II Guerra Mundial fue forzado a entrar en el servicio militar y capturado por soldados americanos, pero regresó a su hogar, en lo que sería República Democrática Alemana (RDA) en 1949. Durante la década de losaños cincuenta, mientras trabajaba en una librería y, más tarde como periodista, empezó a escribir obras de teatro, de las que la primera en estrenarse fue Diez días que estremecieron al mundo (1957). Una obra posterior, Los campesinos (1961), fue prohibida por ser demasiado realista en su retrato de la vida rural, mientras La construcción (1965) fue denunciada por el líder de la RDA, ErichHonecker, por mostrar a un funcionario negociando con los obreros de la construcción para terminar una obra. Müller evitó posteriores confrontaciones trabajando sobre adaptaciones de antiguas tragedias griegas y de obras de William Shakespeare, antes de volver a obras acerca de la historia de Alemania, como la experimental Vida de Grundling Federico de Prusia, sueño y grito de Lessing (1979). Despuésde la desaparición de la RDA en 1989, Müller presentó su Hamlet/Hamletmáquina (1990) en el Deutsches Theater de Berlín como un "funeral" por los teatros de la Alemania Oriental amenazados de cierre. Ha sido uno de los directores artísticos de la compañía teatral del Berliner Ensemble. Heiner Müller murió el 30 de diciembre de 1995 en Berlín.
Heiner Müller: teatro en dictadura 
por Luis Navarro|
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El dramaturgo alemán Heiner Müller (1929-1995) tiene mucho predicamento en los espacios alternativos de nuestro país. Gusta porque propone en su obra un teatro vanguardista y transgresor, cuyo experimentalismo en algunos casos ha influido a multitud de epígonos que se apropian de sus características formales, peroque no consiguen a menudo captar toda la complejidad temática de este autor. Lo que en Müller es un teatro histórico y político con una estética innovadora, en muchos de sus seguidores se suele quedar en un teatro superficial, vacío de contenido.

No se puede sintetizar la estética del teatro de Müller en una serie de rasgos, pues ésta ha cambiado mucho a medida que evolucionaba su producción–él mismo afirmaba no tener estilo, sino afrontar la escritura de cada obra de una manera diferente–. Su labor teatral comienza en los años 50, con una serie de obras que podrían situarse en el realismo social y que tienen una estructura dramática tradicional. Estas piezas se ambientan en espacios obreros –fábricas, tabernas, despachos de ingenieros– y tratan de la construcción de la Alemaniasocialista. Hay que señalar que Müller vive en la RDA y que es un socialista que ama su país, aunque desde sus inicios se muestra muy crítico con los órganos de poder y ciertos aspectos de su sociedad –lo que no le acarrearía represiones, pero sí una marginación de la cultura oficial y serios problemas económicos–. Los temas sobre los que reflexiona en este primer teatro, que siempre concluye con unaperspectiva optimista y esperanzada, son puramente políticos o laborales: el aumento de los niveles de producción sin incremento del salario correspondiente; la falacia de la propiedad popular de las empresas; la confrontación entre los estajanovistas y el resto de operarios, y la desnazificación incompleta de la sociedad alemana, en la que muchos simpatizantes del partido nazi adquieren una buenasituación social. Lo cierto es que los asuntos tratados pueden parecer un poco áridos, pero los textos son dramáticamente interesantes, con una construcción novedosa de las escenas, una reelaboración del planteamiento-nudo-desenlace y la incorporación de fragmentos narrativos entre los diálogos. El hundesalarios y La rectificación son dos de las obras incluidas en este primer período, escritas...