Ningún hombre es una isla

Ningún Hombre es una Isla
Esta frase del moribundo poeta inglés John Donne escrita en su libro Devociones para ocasiones emergentes (1624) fue escrita como una expresión de humanidad y de compasiónpor el ser humano en sí, por el compartir con él del milagro de la vida. Sin embargo, esta no se aleja y más bien retrata fielmente el interés de la Psicología Social de redefinir el concepto deidentidad, no como el que reafirma la singularidad y la individualidad, sino como el epítome de la colectividad expresada de múltiples maneras en cada sujeto.
La concepción de la Psicología Social del yocomo habitante entre las personas y no de cada persona presupone un argumento contra-intuitivo como lo son muchos otros de la disciplina (Burr, 1995). La utilización de la palabra “yo” implica unidad.Gramaticalmente se utiliza para denotar a la primera persona del singular dándole un carácter limítrofe entre el sujeto o ente que soy y el mundo. Sin embargo, desde el estudio de todas las cienciassociales se halla implícita la importancia de las interacciones sociales, de estas como un objeto de estudio. La definición del individuo requiere de la definición de su entorno, ningún hombre es unaisla.
Dentro de los intereses de la disciplina nos encontramos con el cuestionamiento de lo que se cree que existe, una perspectiva anti-esencialista que sin duda alguna busca desdibujarpreconceptos. La identidad individual, singular y única es un preconcepto de la sociedad occidental y presupone que hay algo del individuo que es inherente a él, una esencia que lo hace lo que es e impide que seaotra cosa. Y esto va a ser refutado categóricamente por los autores Gergen (2006) y Burr (1995) que, al poner de relieve los análisis históricos y culturales nos demuestran que así como muchos otrosconceptos de nuestra sociedad, la identidad es uno que existe sólo en cuanto se halla dentro de un marco temporoespacial determinado. Esto es expuesto con toda claridad cuando Burr (1995) habla de...